El Festival of Speed de Goodwood 2022 ha dado mucho de qué hablar, ya que allí se han dado cita nuevos lanzamientos, prototipos y, sobre todo, una enorme cantidad de modelos eléctricos que se han podido ver en directo por primera vez. Sin embargo, la noticia más relevante viene por parte de la startup inglesa McMurtry, quienes han roto todos los récords en la subida a la famosa colina con un vehículo eléctrico de lo más llamativo.
El anterior récord en Goodwood lo ostentaba Volkswagen, que en el año 2019 estableció un tiempo de 39,9 segundos para recorrer los 1,86 kilómetros de la pequeña pista. El piloto que hizo efectivo tal cronometraje fue Romain Dumas al volante de un coche eléctrico de carreras, el Volkswagen ID.R. Este, a su vez rompía un récord alcanzado 20 años atrás por Nick Heidfeld tras los mandos de un McLaren de Fórmula 1 del año 1998. Sin embargo, todo esto ha quedado atrás gracias a McMurtry y su vehículo eléctrico, el Spéirling, el cual ha superado al modelo eléctrico de Volkswagen en 0,8 segundos, marcando así un tiempo récord de 39,08 segundos. En este vídeo se puede ver la subida del Spéirling la cual llega a ser del todo hipnótica.
Este modelo es un vehículo totalmente eléctrico que hace uso de una serie de ventiladores situados en los bajos del coche cuya función es succionar todo el aire que pasa por la parte inferior del vehículo y canalizarlo hacia la zona trasera del mismo, creando así un vacío debajo del vehículo que aumenta la carga aerodinámica y, al mismo tiempo, crea un impulso desde la parte posterior. Esto deriva directamente en una mayor capacidad de aumentar la velocidad e incrementar la carga aerodinámica que mantiene al vehículo pegado al suelo.
Gracias a esta tecnología mecánica, el McMurtry Spéirling realiza el 0-100 km/h en apenas 1,5 segundos y consigue una carga aerodinámica de hasta 2.000 kilos desde parado, más de lo que produce un Fórmula 1 actual a 250 km/h. Según los pocos datos que ha proporcionado la compañía sobre su mecánica y potencia, el modelo pesa menos de 1.000 kg y tiene una relación peso-potencia de 1.000 CV por tonelada. La energía es proporcionada por una batería de 60 kWh de capacidad, la cual se sitúa alrededor de la cabina, es decir, forma parte del propio chasis del vehículo.
Las medidas de este vehículo son realmente cortas: mide sólo 3,5 metros de largo, 1,7 metros de ancho y 1,1 metros de alto. Los apéndices aerodinámicos relucen en toda su carrocería, mostrando entradas y salidas de aireación, así como un enorme alerón posterior o unas formas nada convencionales. Su interior está homologado para un solo pasajero y el minimalismo se cobra todo el sentido donde únicamente se encuentra un volante con una pantalla integrada en el mismo, así como dos pequeñas salidas de aireación para el aire acondicionado. La fabricación de cada uno de sus paneles está realizado en fibra de carbono.
Durante la misma celebración del evento inglés, Autocar ha podido realizar una entrevista al creador de la marca, Thomas Yates, quien confirmó que, a pesar de que este vehículo aún es un prototipo, esperan producir en serie el modelo como una edición de tirada muy limitada, y que tendrá la misma arquitectura mecánica y especificaciones que el modelo eléctrico poseedor del récord de subida a la colina de Goodwood.
“Queremos proporcionar algo que se pueda conducir por el centro de Londres y después entrar en una pista para batir récords”, aseguró Yates en su intervención. “Su única emisión será lo que estuviese en el suelo antes de que llegaras”, acentuaba sobre la capacidad de succión de sus ventiladores y el nivel de emisiones de carbono neutra que posee el vehículo. También admitió que solo se fabricarán un puñado de unidades del mismo y que cada una de ellas “alcanzará las siete cifras”, es decir, al menos 1 millón de euros por vehículo.
Como añadido, la versión adaptada para circular por las calles deberá obtener unos nuevos faros funcionales, una reducción de la ventilación aerodinámica trasera y limpiaparabrisas, aunque en cuanto a especificaciones y mecánica esperan conservar todo lo posible con respecto al prototipo presentado en Goodwood.
Adicionalmente también habló sobre el futuro de la marca, y es que este no será el único vehículo que esperan lanzar ya que, una vez este haya iniciado su comercialización, quieren comenzar con el desarrollo de un vehículo aún más pequeño y que tenga como objetivo principal la velocidad y la aerodinámica. Este también hará uso de una cabina monoplaza ya que Yates afirmó que “ya existen demasiados biplazas en el mercado entre los que poder elegir”. Aún no se ha pronunciado sobre posible fecha de presentación del modelo final o estimación sobre su inicio de producción en serie.