La firma de Múnich lleva años investigando el desarrollo de la realidad aumentada en sus vehículos. No es la única compañía que está trabajando en ello, ya que Mercedes-Benz cuenta con la integración de esta tecnología en varios de sus modelos y aplicaciones, como el propio navegador. Sin embargo, BMW irá un paso más allá sustituyendo las pantallas que ahora se utlizan para la información y el entretenimiento de sus ocupantes. ¿Cómo lo logrará? Gracias a la ayuda de Meta.
La compañía norteamericana Meta (anteriormente conocida como Facebook) lleva algunos años inmersa en el avance tecnológico en materia de realidad aumentada. La empresa ha dado importantes pasos al respecto y ya cuenta con un arsenal de elementos que irá sacando al mercado en los próximos años. Ahora, BMW ha decidido asociarse a Meta para la incorporación de esta tecnología en sus coches eléctricos del futuro.
Hasta el moemento, BMW no encontraba el factor elemental para que el propio movimiento del coche y la estabilidad visual en el interior del vehículo no obstaculizase el funcionamiento de la inteligencia artificial. Gracias a la asociación con Meta, han dado con la clave para solucionarlo.
Desde Meta han creado un particular casco conceptual con el que el usuario que se lo ponga podrá contar con información avanzada de su entorno, así como escuchar las explicaciones al respecto. Esta tecnología no sólo supondrá un paso adelante con respecto a la mencionada información, sino que también podrá emitir películas, series o escuchar música sin que ello repercuta en el conductor o en el resto de usuarios del coche.
Este avance podría ser un primer paso en pos de la eliminación de las pantallas de información y entretenimiento ubicadas en la segunda fila de asientos, por ejemplo. El nuevo BMW i7 integra una serie de paneles con los que controlar diversos elementos funcionales de la parte trasera, así como una enorme pantalla de 8K desde la que poder ver películas. Como decimos, estos elementos podrían desaparecer en favor de unos cascos de realidad aumentada.
Además, la información que sus usuarios verían frente a sí podría incluir pasatiempos o datos relativos a su propia cuenta personal de la nube: calendario, llamadas o chats abiertos, entre otros.
Pero, ¿cómo se ha logrado integrar esto en el propio vehículo? BMW y Meta han conectado una serie de sensores del vehículo al propio sistema de seguimiento de un Meta Quest Pro, algo que le ha permitido calcular tanto la ubicación del dispositivo con respecto al propio coche, como con relación al resto del mundo.
“Nuestro prototipo de investigación muestra que podemos habilitar experiencias entretenidas y cómodas para los pasajeros ancladas en el propio automóvil que incluye la realidad virtual y realidad mixta. Ello incluye videojuegos, entretenimiento audiovisual, productividad o capacidades de meditación”, afirmó Richard Newcombe, vicepresidente de Investigación Científica de Meta.
Por supuesto, esto no es más que un primer avance de esta tecnología que aún podría estar lejos de llegar al mercado. “Es demasiado pronto para decir exactamente cómo o cuándo llegará a las manos de los clientes, pero prevemos una serie de posibles casos de uso para los dispositivos de realidad aumentada en los vehículos. Las implicaciones de esta futura tecnología son prometedoras, tanto para los conductores como para los pasajeros”, afirmó Claus Dorrer, director de Tecnología del Grupo BMW.
