Hace escasas horas se ha confirmado el récord del mundo de aceleración de 0 a 100 km/h de un coche eléctrico. El tiempo en ejecutar dicha maniobra fue de apenas 1,461 segundos. La anterior marca estaba situada en 1,513 segundos, la cual se logró en Suiza en el año 2016. El nuevo Récord Guinness se lo ha arrebatado un vehículo eléctrico fabricado, diseñado y construido por un grupo de 20 estudiantes de la Universidad de Stuttgart, en Alemania, lo que supone una ventaja de algo más de 0,05 segundos. Este se llama E0711-11 EVO y ha sido realizado por el grupo universitario GreenTeam que ya han coronado algunos otros récords.
Esto supone todo un salto en cuanto a prestaciones establecidas para vehículos comerciales. Bien es cierto que el modelo que ha cosechado dicho récord mundial está diseñado y desarrollado para dicho fin, algo que no resta mérito ya que es 0,5 segundos más rápido que un Rimac Nevera, 0,6 segundos más que un Ariel Hipercar o 0,9 segundos más que un Tesla Model S Plaid. Modelos que incluso multiplican por 5 la potencia del pequeño eléctrico alemán.
Como siempre, una de las claves a tener en cuenta en un vehículo ligero, es su peso final. El pequeño vehículo eléctrico alemán detiene la báscula en apenas 145 kilos y produce 247 CV a partir de un esquema de doble motor eléctrico dual, uno situado en cada rueda, lo cual supone que este posee tracción total a las 4 ruedas.
Bajo la tímida carrocería de fibra de carbono se ha acomodado un conjunto de baterías diseñadas a medida con una capacidad de 7,67 kWh. Con estas cifras se especifica que el modelo eléctrico produce alrededor de 1.730 CV por tonelada y obtiene una aceleración máxima de 2G. Los estudiantes y responsables del proyecto han publicado un vídeo de sus capacidades en YouTube.
Los 20 integrantes del proyecto son estudiantes de una variedad de especialidades en dicha universidad aunque la práctica totalidad se centran en el desarrollo automotriz, ya sea en mecánica, aerodinámica o química de materiales. Este récord debieron cumplirlo el pasado mes de septiembre, pero una serie de problemas técnicos obligaron al equipo a posponer el hito.
A mediados del pasado verano, los universitarios ya probaron suerte, lo que supuso un enorme revés, puesto que el pequeño eléctrico perdió el control a gran velocidad y se estrelló contra las barreras protectoras del trazado. “Sufrimos un revés amargo. Afortunadamente, el conductor resultó ileso, pero el vehículo sufrió daños enormes”, afirmó Pavel Povolni, presidente del equipo. Diogo Silva, el piloto que logró el récord de aceleración, admitió que “ha sido agotador, pero una experiencia única que mereció la pena”.
Esta no es la primera vez que el equipo GreenTeam obtiene un récord de velocidad en un vehículo diseñado y producido por estudiantes universitarios. El primero de ellos fue alcanzado en 2012 con un tiempo final de 2,681 segundos en el 0 a 100 km/h. Desde el grupo de estudiantes aspiran a seguir mejorando este proyecto y continuar cosechando Récords Guiness de aceleración en los próximos años.