La empresa española GDV Mobility ha anunciado este jueves la apertura de la primera gigafactoría circular de Europa con el objetivo de colocar a España "a la cabeza de la sostenibilidad del vehículo eléctrico", según ha informado la compañía en un comunicado.
El modelo sobre el que se sustenta esta planta, CircularFactory, representa una adaptación de la teoría de las 3R (reducir, reutilizar y reciclar) y hace que GDV Mobility se convierta "en la primera empresa del mundo en integrar en una sola compañía el proceso completo", explica el consejero delegado, Germán Agulló.
La gigafactoría se ubicará en Alicante. En concreto, la empresa se encargará de la recepción de la batería y si se puede reparar "se hará". Si no se puede reparar, se reutilizará para fabricar megabaterías estacionarias como la G-One (una batería del catálogo de GDV Mobility) o enviándola a la planta para tritularla y separar los metales.
"Hemos conseguido posicionar a GDV como un actor estratégico, al ser a día de hoy una de los únicas dos empresas en el mundo que no sean asiáticas capaces de separar los materiales con un producto posible para incorporar en nuevas baterías fabricadas en Europa", ha añadido.
Redwood Materials, en Estados Unidos y creada por uno los cofundadores de Tesla, y Mercedes-Benz en Alemania tienen sendas fábricas de reciclaje, donde recuperan hasta el 96% de los materiales originales.
En julio de 2023, la Unión Europea impuso una nueva normativa que exige que, a partir de 2027, todas las baterías incluyan materiales reciclados y sean gestionados por operadores europeos de residuos. El objetivo es reducir la dependencia de materias primas procedentes de Asia y aumentar la sostenibilidad en el continente.
De forma complementaria, la firma presentó en septiembre la G-One, una megabatería estacionaria de 7 megavatios que destaca por ser la "más barata, rentable y segura del sector", asegura la compañía española. Su proceso de reciclaje y montaje consiste en recibir residuos de baterías de cualquier punto de Europa, las cuales se desmontan y analizan una a una, para posteriormente poder recuperarlas.
Una vez reutilizadas, las baterías pasan a la línea de producción, donde se fabrican los 484 módulos de 14 kW de celdas NCM que lleva la G-One. Esta megabatería reduce los costes entre un 40% y 60% en comparación con otras soluciones de fabricación convencional (es decir, sin materiales reutilizados).
Además, GDV asegura que G-One es la primera megabatería en incorporar un nuevo sistema contraincendios modular por inundación compartimentada, que, en caso de incendio en algún módulo, garantiza que este se aísle y se extinga automáticamente impidiendo la propagación a otros módulos.