Las baterías de iones de litio son las auténticas dominadoras del mercado del almacenamiento de energía. Alimentan una amplia gama de dispositivos, desde teléfonos inteligentes hasta vehículos eléctricos y sistemas estacionarios. Durante la última década, su precio ha experimentado reducciones notables, aumentando su accesibilidad y su empleo en diversas aplicaciones.
Sin embargo, en los últimos años, la situación geopolítica mundial, la crisis de la cadena de suministro y la variación del precio de los materiales, muy dependientes de la coyuntura mundial, ha ralentizado la tendencia descendente de los precios hasta tal punto que en 2022 se registró un aumento de los precios sin precedentes. La consultora BloombergNEF ha publicado el informe en el que recoge la encuesta anual de los precios de las baterías entre 2022 y 2023, analiza lo ocurrido en los últimos 12 meses y trata de predecir lo que ocurrirá en un futuro.
Las materias primas reducirán el precio, pero las nuevas localizaciones lo aumentarán
Para la producción de baterías de iones de litio se necesitan materias primas como el litio, el cobalto, el níquel o el grafito. Las variaciones en los precios de estos materiales inciden directamente en los costes asociados con su fabricación. Un ejemplo claro de esta dependencia es la escasa disponibilidad de cobalto y las complicaciones geopolíticas que generan una alta volatilidad de sus precios.
La consultora anticipa que los tres componentes esenciales, litio, níquel y cobalto, experimentarán una reducción de sus precios en 2024 que contribuirá a la bajada de los precios de los paquetes de baterías.
Sin embargo, las nuevas ubicaciones de la producción de baterías en Estados Unidos y Europa pueden generar una presión al alza en los precios de los paquetes de baterías, dado que conlleva costes más elevados en la línea de producción en comparación con la fabricación en Asia. Tanto la energía, como los equipamientos, los terrenos y la mano de obra suponen un sobrecoste frente a los fabricantes asiáticos. Las políticas locales y las ayudas fiscales a la producción pueden mitigar este efecto.
A nivel regional, el precio promedio de una batería es más bajo en China, 126 $/kWh mientras que en EE.UU y Europa se incrementan en un 11% y un 20% respectivamente. Estos precios reflejan la relativa inmadurez de estos mercados, los mayores costes de producción, los volúmenes más reducidos y la diversidad de aplicaciones. Por otro lado, este año China experimentó una fuerte competencia de precios a nivel nacional por el aumento de la capacidad de producción de sus fabricantes con el objetivo de satisfacer la creciente demanda de baterías.
Adiós a la economía de escala, hola a la tecnología
A pesar del marcado aumento en la demanda de baterías, tanto para vehículos eléctricos como para almacenamiento de energía estacionario, los principales fabricantes han anunciado una reducción en las tasas de demanda y en sus ingresos. Evelina Stoikou, autora principal del informe, afirma que 2023 “es otro año en el que los precios de las baterías han seguido de cerca los precios de las materias primas. A lo largo de los años en los que hemos realizado esta encuesta, la reducción de los precios ha respondido a los beneficios del escalado de la producción y la innovación tecnológica, pero esa dinámica ha cambiado”.
Mientras que la capacidad de producción de baterías crece, los fabricantes pueden capitalizar las economías de escala, reduciendo el coste por cada batería. Una mayor producción optimiza sus procesos y disminuye los costes, lo que a su vez permite reducir los precios de venta. Sin embargo, la reducción de los precios de este año ya no se aprovecha de este efecto sino que se atribuye a un aumento significativo en la capacidad de producción en toda la cadena de valor, combinado con una demanda más débil de la prevista.
Por otro lado, la tecnología ha logrado mejorar la densidad energética y el rendimiento global de las baterías de iones de litio. Estos progresos abarcan mejoras en la química del cátodo, los materiales del ánodo, los electrolitos y los procesos de fabricación. Estas innovaciones dan como resultado baterías más económicas de producir conservando o mejorando sus capacidades. El resultado de estos progresos conduce a la reducción de los costes.
Entonces, ¿qué pasará el año que viene y durante el resto de la década?
El comunicado de prensa emitido por BloombergNEF indica una reducción de los precios de las baterías de iones de litio debida a la bajada de los precios de las materias primas y los componentes que, a su vez, ha sido provocada por el aumento de la capacidad de producción en toda su cadena de valor.
De manera general, el precio de los paquetes de baterías de iones de litio ha experimentado una reducción del 14% en 2023, alcanzando un mínimo histórico, 139 $/kWh. Yayoi Sekine, directora de almacenamiento de energía de BNEF, afirma que durante los últimos dos años, los precios de las baterías han experimentado una auténtica montaña rusa y explica las razones. Mercados tan importantes como los de Estados Unidos y Europa están aumentando su producción local de celdas: “Estamos monitorizando de cerca cómo los estímulos a la producción y las estrictas regulaciones sobre los minerales críticos impactarán en los precios de las baterías. Estos esfuerzos de localización agregarán una capa de complejidad a la manera en que los precios de las baterías se establecerán regionalmente en los próximos años”.
Según la proyección de BNEF, el año que viene el precio promedio descenderá hasta los 133 $/kWh, teniendo ya en cuenta la inflación de 2024. Más allá, BNEF anticipa una reducción significativa en los precios de las baterías hasta alcanzar los 113 $/kWh en 2025 y los 80 $/kWh en 2030. Serán los avances tecnológicos los responsables de esta reducción. La industria sigue avanzando hacia la adopción de la química LFP (litio ferrofosfato) ya que ofrece precios medios más bajos en comparación con las celdas de óxido de cobalto, manganeso y litio (NMC). De hecho, en 2023, los precios de las células LFP descendieron por primera vez por debajo de los 100 $/kWh.