El cambio radical que está experimentando la industria del automóvil está provocando una transformación igualmente significativa en los sectores secundarios que la sustentan, especialmente en la venta de vehículos eléctricos. Mientras que algunos de estos sectores desaparecerán y otros evolucionarán o transformarán sus productos, surgen nuevas áreas que no existían antes o que crecerán tanto que incluso superan al principal.
Además de los motores, las baterías son el componente distintivo de los vehículos eléctricos y generan una gran cantidad de oportunidades de negocio. A pesar de que la tendencia de la industria es lograr una mayor densidad energética, lo que implica una reducción en el uso de materiales, un informe de la consultora Meticulous Research advierte que el mercado de las baterías de los vehículos eléctricos será un gigante en 2031, pero que hay que cuidar los pilares sobre los que se sustenta.
Realidades del mercado y también avisos ‘para navegantes’
Fundada en 2010, esta consultora se dedica a ofrecer servicios que incluyen informes de investigación de mercado y análisis de tendencias del mercado en varios sectores, entre ellos el de la automoción, el transporte y las energías renovables.
Según Meticulous Research, el mercado de baterías para vehículos eléctricos generará más de 415.900 millones de dólares (387.666 millones de euros) en 2031, implicando un crecimiento a una tasa compuesta anual del 33,1%. Las baterías, utilizadas tanto en vehículos completamente eléctricos como en híbridos enchufables, verán un crecimiento significativo impulsado por políticas públicas y regulaciones gubernamentales destinadas a reducir los precios de las baterías y aumentar la inversión de los fabricantes.
Sin embargo, el informe advierte que la posible escasez en las capacidades de extracción de litio y la baja densidad energética pueden limitar el crecimiento de este mercado. A pesar de esto, se espera que la adopción de vehículos eléctricos en las economías emergentes, las crecientes inversiones para mejorar las capacidades de extracción, y el despliegue de esta tecnología, generen oportunidades de crecimiento en los próximos años.
Europa tiene mucho que decir
Según el informe, se espera que en 2024 el segmento de las baterías de iones de litio constituya la mayor parte del mercado global de baterías para vehículos eléctricos. No obstante, subrayan la importancia de asegurar las cadenas de suministro de estas baterías.
En este contexto, varios fabricantes de automóviles han establecido alianzas con productores de baterías para garantizar el suministro. En abril, BMW se asoció con la croata Rimac Technology para desarrollar baterías de alto voltaje para vehículos eléctricos, mientras que Hyundai firmó un memorando de entendimiento con la india Exide Energy Solutions para suministrar baterías a sus vehículos eléctricos, con el objetivo de mejorar su competitividad en el tercer mercado automovilístico más grande del mundo.
Además, los fabricantes de baterías están incrementando sus inversiones en investigación y desarrollo de nuevas tecnologías para reducir el tamaño de las baterías de manera rentable y mejorar su rendimiento. En octubre de 2023, Honda se asoció con General Motors para desarrollar vehículos eléctricos asequibles, un año después de acordar trabajar juntos para intentar superar a Tesla en ventas.
Consecuentemente, se estima que este año la región de Asia-Pacífico representará la mayor parte del mercado global de baterías para vehículos eléctricos, aunque se prevé que Europa tome la delantera.
Para 2030, se espera que Alemania tenga la mayor capacidad de fabricación de baterías en Europa. Países del este del continente, como Hungría y Polonia, también han atraído importantes inversiones de los principales fabricantes asiáticos de baterías, debido a que la tierra y la mano de obra son más baratas y por su proximidad a la industria automovilística alemana.
