Normalmente cuando hablamos de BMW lo hacemos por noticias procedentes de su gama de coches eléctricos, o tal vez, por el lanzamiento de las versiones híbridas enchufables de sus coches en España, como el Serie 5 PHEV que hemos anunciado hoy. Pero hoy el caso sería bien distinto, porque pocos esperarían hablar de un modelo de BMW llamado Active Hybrid, y que este acabe resultando ser una bicicleta eléctrica.
La última vez que un modelo de dos ruedas eléctricos del fabricante bávaro pasó por nuestra portada fue a caso del registro en la oficina de patentes de Alemania del nombre DC Roadster, que directamente nos hizo pensar en su prototipo presentado meses atrás, que se podría encontrar en una potencial camino a producción.
Hoy las dos ruedas no se podrían mover por completo por sí solas, parece. La firma alemana ha decidido llamar a su bicicleta eléctrica Active Hybrid por un dilema de planteamiento de una bicicleta eléctrica, ya que plantea una mezclada personalidad entre una bicicleta urbana, es decir, una bicicleta eléctrica de paseo, y una bicicleta eléctrica de tipo commuter, aquellas pensadas para rodar a algo de más velocidad pero sin dejar de lado el entorno urbano, con el fin de poder llevar a cabo acciones diarias como ir al trabajo sin mayor problema.
Por tanto, por concepto estaríamos ante una bicicleta urbana de tipo commuter, similar a otras que han pasado por nuestra portada, como la Specialized Turbo Vado SL 4.0, aunque la alemana protagonista de hoy brinda el hecho de llevar consigo, en su eje delantero, una horquilla firmada por Suntour, modelo NCX que hará más fácil atacar bordillos, badenes e irregularidades del piso.
BMW plantea una bicicleta eléctrica de diseño típicamente alemán, con un marco contundente, podríamos decir, que luce orgullosa las siglas de BMW en tu tubo superior. Dadas sus especificaciones no estaríamos ante un bicicleta destinada a sacar lo mejor del ciclista en un uso deportivo.
El esquema eléctrico que porta la BMW Active Hybrid no destaca especialmente en sus cifras, pero sí que para el precio final que anuncian los alemanes, es más que correcto. Se trata de un dueto de motor eléctrico y paquete de baterías, que como siempre se alojan en el eje del pedalier y en el tubo inferior del cuadro respectivamente, que además es extraíble para cargarlo de manera externa.
El motor es suministrado por el fabricante alemán Brose, y lleva a la Active Hybrid a los limitados 25 kilómetros por hora en zona europea sin ningún problema gracias a sus 90 Nm de par y una potencia sostenida de 250 W. El otro integrante del esquema eléctrico, el paquete de baterías de iones de litio, marca una capacidad de 600 Wh, pero BMW no ha facilitado datos de autonomía eléctrica, si bien dada la capacidad de su batería no deberíamos tener problemas para alcanzar distancias de 60 kilómetros siendo asistidos al pedaleo por su esquema eléctrico.
El display a color que equipa la bicicleta eléctrica de BMW.
A cargo de Shimano quedan los otros dos esenciales componentes en toda bicicleta eléctrica. El primero, la frenada, con discos accionados hidráulicamente en ambos ejes, con 180 milímetros de diámetro en el delantero y 160 en el trasero. La transmisión es una Shimano Deore XT de 10 relaciones.
El display ubicado en el manillar de la Active Hybrid permite ajustar el grado de asistencia al pedaleo, y es posible elegir entre cuatro modos de potencia, desde ECO con un 50% de asistencia, hasta TURBO (+275%). Además, gracias a la toma USB y la función Bluetooth, los que opten a comprar una pueden conectar su smartphone a la bicicleta.
Hasta aquí todo bien, y no por entrar en el terreno del precio se oscurece la situación, ya que la bicicleta eléctrica de BMW, no por pertenecer a la firma de coches prémium, encarece su tarifa de partida con respecto a la competencia, si bien es cierto que siendo una bicicleta eléctrica hace que su precio se sitúa en los 3.400 euros, y es fácil hacerte con ella a través de cualquier concesionario BMW o en múltiples webs especializadas en bicicletas.
