La avenida Sutherland, en Londres, se ha convertido en la primera calle del mundo convertida por completo en una "estación" de carga de vehículos eléctricos. Siemens, Ubitricity y el Ayuntamiento de Westminster han finalizado un proyecto piloto en el que cada una de las 24 farolas de esta avenida han sido transformadas en puntos de recarga para coches eléctricos. Dentro del mismo proyecto se incluyen otras dos calles más, adyacentes con la primera, que serán acondicionadas en las próximas semanas.
La avenida Sutherland es una gran calle de doble carril, con aceras arboladas en sus dos laterales, que atraviesa el corazón de Maida Vale. Con casi un kilómetro de longitud, en las aceras laterales las farolas se encargaban, hasta ahora, de alumbrar a los peatones y a los vehículos que circulaban por ella. Ahora ha pasado a llamarse Electric Avenue, W9, al convertirse en una estación de recarga de vehículos eléctricos con la culminación del proyecto que han llevado a buen término Siemens, Ubitricity y el Ayuntamiento de Westmister. Las 24 farolas que han sido convertidas en puntos de recarga para vehículos eléctricos son un ejemplo de la utilización de la infraestructura existente para un cometido diferente del que fueron creados.
Avenida Sutherland, en Londres.
Electric Avenue W9 es un "escaparate importante de lo que es posible lograr utilizando la infraestructura existente de la ciudad", afirma Cedrik Neike, CEO de Siemens Smart Infrastructure, soluciones como esta podrían hacer cambiar de opinión a algunos compradores británicos. En un estudio realizado por la compañía alemana, un 36% de los que planean comprar un coche nuevo se decantaría por uno eléctrico o híbrido, pero dos de cada cinco de ellos admitieron que la falta de puntos de recarga les impide decidirse ya por esta tecnología.
El estacionamiento y la recarga en la vía pública es un tema crucial en todo Reino Unido y en Londres en particular. El Ayuntamiento de Westminster, que gestiona gran parte del centro de West London, afirma que tiene el doble de vehículos eléctricos registrados que cualquier otro distrito del interior de Londres. De un total de 296 puntos de carga situados en farolas, 24 se encuentran en Electric Avenue, W9. Según el comunicado de prensa, el objetivo del Ayuntamiento es alcanzar 1.000 puntos de recarga en el próximo año.
Esta no es la primera colaboración entre las dos empresas alemanas y un distrito londinense. En Richmond, pusieron en marcha un proyecto financiado por el Go Ultra Low City Scheme, administrado por el Departamento de Transporte londinense, con 200 cargadores de vehículos eléctricos, ubicados en las farolas. Con estos puntos de recarga los propietarios de un coche eléctrico pueden acceder a la recarga vinculada sin necesidad de disponer de un garaje o una ubicación donde instalar su punto propio. El objetivo final del proyecto es instalar 1.150 puntos de carga para vehículos eléctricos en los distritos de Londres a finales de 2020.
Proyecto Electric Avenue W9.
Con la puesta en marcha de Electric Avenue W9, Siemens y Ubitricity han instalado hasta ahora más de 1.300 puntos de recarga que cubren prácticamente toda la ciudad. El lugar en que existe una farola con punto de recarga está identificado por letreros y líneas pintadas en el suelo. Para estacionar, el coche deberá ser eléctrico y estar conectado a la red mediante un cable especial. Este cable inteligente será facilitado a cada uno de los usuarios para que se pueda contabilizar y facturar el consumo de energía que se realice mediante una tarjeta SIM y una conexión de datos incorporada. Las farolas con punto de carga, a excepción de la toma de corriente que tendrán cerca de la base, no se diferencian en nada del alumbrado habitual en las ciudades.