Yasa, uno de los fabricantes de controladores y motores eléctricos de flujo axial líderes del mercado, ha firmado un acuerdo con una empresa de equipos y componentes originales para el desarrollo de motores y controladores hechos a medida. El objetivo de la OEM, de la que por el momento se desconoce la identidad, es el de crear soluciones más eficientes para la propulsión de coches híbridos y eléctricos de baterías de altas prestaciones para su distribución a nivel global.
Los motores de flujo axial desarrollados por Yasa, en la actualidad ya cuentan con un diseño capaz de generar cantidades óptimas de fuerza par y potencias totalmente útiles para su aplicación en automóviles y aviones con una eficiencia superior a la de los motores convencionales (de flujo radial) que se utilizan en los vehículos eléctricos de hoy en día. Ahora, gracias a este nuevo acuerdo, los ingenieros de Yasa trabajarán con su nuevo socio para mejorar las prestaciones de los vehículos, seguir optimizando su eficiencia y, a su vez, reducir el peso de los componentes.
Este anuncio llega justo después de que la empresa publicase sus planes de construir una nueva fábrica con capacidad para ensamblar 100.000 motores eléctricos al año en Oxford, Reino Unido. Desde inicios de 2019 también se ha hecho público un acuerdo entre Yasa y Rolls-Royce para el suministro de motores eléctricos que se emplearán para la propulsión del que está llamado a ser el avión eléctrico más rápido del mundo a partir de 2020.
Chris Harris, CEO de Yasa, ha reconocido en declaraciones a electric&hybrid que "este acuerdo une una de las empresas fabricantes más conocidas de la industria de la automoción con Yasa, compañía líder en el suministro de motores eléctricos de flujo axial. Mediante este acuerdo de larga duración, ambos compartiremos nuestra pasión por la innovación y el mismo compromiso por alcanzar la excelencia", aseveró.
Una tecnología revolucionaria
Los motores eléctricos de flujo axial son considerados por muchos una tecnología llamada a revolucionar los sistemas de transporte eléctrico gracias a su mayor eficiencia y sus dimensiones más compactas. De hecho, según Magnax, otra de las empresas que están desarrollando esta tecnología, con un motor de solamente 7 kilogramos de peso se pueden obtener hasta 84 kW de potencia (113 CV). Unidades mayores, con poco más de 20 kg, pueden alcanzar potencias de entre 300 y 400 kW. Esto es posible gracias a que mediante un mayor aprovechamiento del filamento, dispuesto en el plano axial, se obtienen eficiencias de hasta el 96%.