El sector automovilístico europeo no está viviendo sus mejores días. Sin embargo, son muchos los factores que, aún así, no están permitiendo que este levante cabeza. A finales del pasado 2023 se supo que Alemania retiraba todas las ayudas a la compra de un vehículo eléctrico. Esto supuso todo un varapalo para la industria, ya que sus ventas cayeron significativamente a partir de entonces. Ahora, el ejecutivo germano ha vuelto a dar una nueva estocada al sector.
Concretamente, desde el Ministerio Federal de Educación e Investigación ha confirmado que las nuevas empresas que lleven a cabo investigaciones y desarrollo de baterías para coches eléctricos, ya no recibirán financiación a partir del próximo año 2025. Este sustento únicamente continuará siendo una realidad (aunque en menor medida) para las firmas ya existentes.
Alemania no subvencionará a más investigadores de baterías
Esta es una noticia que lleva varios días saliendo en múltiples entornos. Sin embargo, no ha sido hasta hace unas pocas horas cuando se ha confirmado oficialmente esta nueva medida. La primera sorpresa saltó de la mano de Klib, la red de competencias para baterías de iones de litio, la semana pasada. En su escrito hablaban que los presupuestos alemanes de 2025 podían reducir drásticamente los fondos destinados a tal fin. Tenían razón.
El mencionado ministerio alemán ha confirmado esta medida: “con los fondos restantes, a partir de 2025 es poco probable que se puedan iniciar nuevos proyectos de investigación sobre baterías”. Pese a que el llamado Fondo para el Clima y la Transformación está establecido hasta el año 2028, lo cierto es que este se destinará únicamente a apoyar proyectos ya en curso o los nuevos que comiencen este 2024.
“En el actual ejercicio presupuestario de 2024 todavía se pueden proporcionar nuevos incentivos en el campo de la investigación sobre baterías, que continuarán hasta el 2028. Los fondos necesarios para los años 2025 a 2028 están incluidos en el presupuesto”, afirmó un portavoz del ministerio alemán. Por otro lado, esta institución está buscando actualmente “otras opciones pragmáticas para fortalecer las actividades de investigación sobre baterías”.
Actualmente, el fondo de financiación a este sector tiene que dividir sus 135 millones de euros entre los proyectos en marcha. A esto hay que sumar otros 20 millones de euros adicionales que se destinarán a nuevas adjudicaciones hasta el final del presente año. Los presupuestos futuros sí sostienen los llamados ‘créditos de compromiso’, para sustentar las subvenciones a las empresas que entren antes de finalizar el año y que, se espera, que precisen de estas adjudicaciones durante varios años.
No obstante, para 2025 habrá un total de 118 millones de euros para sustentar a estas compañías en concepto de esos mencionados’ créditos de compromiso’. A partir de 2028 estos presupuestos desaparecerían si no se cuenta con una reanudación de los mismos. Aunque desde Klib temen que esta supresión pueda llegar incluso antes: “Mientras que hace un año el gobierno alemán todavía hablaba de convertir a Alemania en un centro de células de batería, en el futuro se eliminarán por completo los fondos para la investigación”, afirman.
