Dada la pronta fecha de caducidad que el Gobierno de las islas ha puesto a todo vehículo movido únicamente por combustibles fósiles en Reino Unido, los fabricantes locales se han visto acotados temporalmente, y han de ponerse a trabajar a contrarreloj. De entre todos ellos, tal vez Caterham sea el que se encuentra en una peor tesitura, pues su razón de ser no es otra que fabricar deportivos ligeros de gasolina, y los coches eléctricos han de estar en su hoja de ruta si quieren sobrevivir,
No obstante no es el único fabricante que con 2030 como fecha máxima para trabajar con coches de combustión ha tenido que trabajar concienzudamente en adaptar su actividad a estos nuevos tiempos, pues Lotus también goza de una filosofía que gira en torno a deportivos de gasolina ligera. Sin embargo la suerte que ha corrido Lotus tras pasar a manos del gigante chino Geely Group ha sido bien distinta a la de Caterham, pues verá cómo incluso un SUV eléctrico se sumará a su gama en los próximos años.
Caterham es un compañía de pequeño tamaño, y con este próximo deportivo eléctrico buscan asegurar la existencia de la empresa durante al menos 50 años más, a pesar de lo complicado que parece tener el futuro en base a su actividad actual. Aunque ha sido recientemente adquirida por el grupo japonés VT Holdings ésta no ha visto la misma inyección de capital que han visto sus rivales de Hethel. Aunque sí han dado el impulso mínimo como para creer que pueden sobrevivir en esta complicada era de la electrificación.
Así lo dio a conocer la revista local Autocar, que semanas atrás daba a conocer las declaraciones del principal importador de Caterham al mercado japonés, CEO Kazuho Takahashi, quien comentaba acerca de Graham Macdonald (CEO de Caterham): "Le encanta la marca y sabe que no tenemos infinitos pozos de dinero. Sin embargo, está decidido a que esta marca continúe durante otros 50 años."
Si bien el Caterham eléctrico seguirá siendo ligero en comparación con otros coches eléctricos, parece que cambiará algo con respecto a otros modelos del pasado.
Así pues, el reto que tiene por delante la pequeña empresa británica, si bien no se antoja precisamente fácil de afrontar, sí que es apasionante. Caterham ha de lanzar un deportivo que sea fiel a sus modelos actuales y del pasado y que albergue un tren de potencia eléctrico. Según ha comentado Macdonald a Autocar, el primer deportivo 100 % eléctrico de Caterham se situará prestacionalmente a la misma altura que el Caterham 620R.
La incursión de un paquete de baterías en la estructura del deportivo eléctrico de Caterham sumará irremediablemente peso al conjunto, y en la compañía saben que es un paso inevitable, pero pretenden aprovecharlo para ganar confort, parece. Comentaba Macdonald a Autocar: "Será más grande, pesado y más agradable para estar en él". Lo que da pistas de que si bien seguirá siendo fiel a la filosofía de la compañía, podrían sacara tajada del peso extra para dar el confort que siempre ha estado ausente en sus coches.
En base a lo comentado por el CEO de Caterham, parece incluso que la firma ya dispone de un prototipo de pruebas, aunque aún se encuentra buscando un proveedor de los componentes eléctricos que el deportivo eléctrico necesita. Promete un 0 a 100 kilómetros por hora en menos de 3 segundos y podría llegar durante 2023, aprovechando el 50 aniversario de la firma británica.
