Audi acaba de presentar el que probablemente sea uno de los coches de competición más importantes y revolucionarios de los últimos años. Hablamos del nuevo Audi RS Q e-tron, un coche eléctrico con el que la marca de los cuatro aros se enfrentará a una de las carreras de motorsport más duras que existen: el Rally Dakar.
Decíamos que el Audi RS Q e-tron es uno de los coches de competición más revolucionarios en mucho tiempo porque con él Audi se ha planteado un reto mayúsculo como es competir en el Rally Dakar 2022 con un coche totalmente eléctrico. No competir para terminar, sino para ganar. Para conseguirlo, uno de los pilotos que irá a sus mandos será Carlos Sainz, tres veces campeón del Dakar (2010, 2018 y 2020) y dos veces Campeón del Mundo de Rally (1990 y 1992).
Audi quiere convertirse en el primer fabricante de coches en conseguir una victoria del Dakar con un coche eléctrico compitiendo frente a otros con motores de combustión interna. Una tarea harto complicada por varias razones: la primera es lo novedoso del coche, desarrollado desde cero, y su tecnología; la segunda, la exigencia de la propia competición, capaz de tumbar incluso a las mecánicas tradicionales más fiables.
Audi RS Q e-tron.
Sin duda, las etapas del Dakar supondrán un desafío para el equipo de ingenieros y técnicos de Audi Sport. Habida cuenta de la carencia de cargadores en mitad del desierto, Audi ha optado por un propulsor eléctrico con extensor de autonomía. El Audi RS Q e-tron equipa un motor TFSI procedente del DTM, que se encargará de recargar la batería de alto voltaje durante la conducción. El motor de combustión funciona en un rango de máxima eficiencia entre 4.500 y 6.000 rpm, lo que permite un consumo específico por debajo de los 200 gramos por kWh.
El motor de gasolina no tiene conexión mecánica con las ruedas. El sistema de propulsión, es decir, lo que mueve estrictamente las ruedas del Audi RS Q e-tron, es totalmente eléctrico. En cada uno de los ejes del vehículo se monta un motor-generador (MGU) como el utilizado en el actual Audi e-tron FE07 de la Fórmula E, que alcanza una eficiencia energética del 97 %. Tampoco existe conexión mecánica entre los ejes delantero y trasero, así que es el software quien se encarga de distribuir el par entre ambos ejes, haciendo la función de un diferencial central virtual configurable libremente.
Una tercera unidad MGU, idéntica a las otras dos, forma parte del convertidor de energía y se utiliza para recargar la batería de alto voltaje mientras se conduce. La batería, que pesa alrededor de 370 kilogramos, tiene una capacidad de 50 kWh. Además de la energía aportada por el motor de gasolina, la batería también se puede recargar gracias al sistema de recuperación de energía durante las frenadas.
El Audi RS Q e-tron tiene tracción total quattro eléctrica.
La potencia máxima del sistema de propulsión eléctrico es de 680 CV (500 kW). No obstante, la organización del Rally Dakar todavía tiene la última palabra sobre la potencia que se podrá utilizar durante la carrera.
Visualmente, el Audi RS Q e-tron también es diferente al resto de los prototipos del Dakar con sistemas de propulsión convencional. Tiene un aspecto futurista, en el que llama la atención la gran entrada de aire sobre el techo que se fusiona con una aleta de tiburón, y según Juan Manuel Díaz, responsable del Departamento de Diseño de Motorsport de Audi, cuenta con muchos elementos de diseño característicos de la marca.
Audi RS Q e-tron.
Desde que se inició el proyecto de forma oficial ha pasado menos de un año, por lo que Audi ha desarrollado el coche en tiempo récord y sin que se haya concretado la normativa de la carrera para vehículos con sistemas de propulsión alternativos. El Audi RS Q e-tron comenzó sus primeros ensayos reales a principios de este mes de julio y seguirá con un intenso programa de pruebas de aquí hasta finales de año.
Aunque es un reto difícil, la marca solamente tiene que tirar de hemeroteca para comprobar que ya ha cosechado éxitos con tecnologías nuevas. La tracción integral quattro cambió las reglas del juego en el Campeonato del Mundo de Rallies en los años 80. Más tarde, en 2012 se convirtió en la primera marca en ganar las 24 Horas de Le Mans con un coche híbrido -el Audi R18 e-tron quattro-. No es de extrañar que ahora no tengan miedo al desafío del Dakar, que, de paso, les ayudará a desarrollar la tecnología eléctrica en condiciones extremas