Stellantis y TotalEnergies han llegado a un acuerdo con Mercedes-Benz para dar a esta última la bienvenida como nueva socia de Automotive Cells Company (ACC), una empresa conjunta creada el año pasado que se dedicará a la producción de baterías para coches eléctricos. Cada una de las tres compañías socias será propietaria de un tercio de la empresa conjunta.
Con la incorporación de Mercedes-Benz a esta nueva empresa, el objetivo es aumentar la capacidad de producción de ACC hasta, al menos, 120 GWh anuales de baterías en el año 2030. Para ponerlo en perspectiva, el Grupo Volkswagen estima que necesitará aproximadamente 240 GWh en celdas de batería para 2030, cuya producción repartirá en seis gigafábricas situadas por toda Europa, cada una de ellas con una producción de 40 GWh anuales.
Las partes implicadas no han anunciado detalles sobre si la producción se llevará a cabo en una o varias plantas (esto último es lo más probable, dada la magnitud del proyecto). De momento, la compañía tiene un centro de I+D y las instalaciones de pruebas en Nouvelle-Aquitaine (Francia).
El objetivo de ACC es desarrollar internamente y posteriormente fabricar celdas y módulos de baterías para vehículos eléctricos. Los planes de producción de ACC movilizarán una inversión superior a 7.000 millones de euros, provenientes de subvenciones europeas, capital privado y deuda.
ACC quiere llegar a producir 120 GWh de baterías anualmente en el año 2030.
La creación de este gigante de las baterías se materializó en agosto de 2020, promovido por Stellantis y TotalEnergies (propietaria de Saft, con dilatada experiencia en baterías) y apoyada por las autoridades europeas, incluidos los gobiernos centrales de Francia y Alemania. El objetivo es producir localmente y garantizar el suministro de un componente clave para la industria del vehículo eléctrico como son las baterías. O
Otros fabricantes de primer nivel están tomando iniciativas similares; es el caso del Grupo Volkswagen o Renault en Europa; o de Ford, General Motors y Tesla en Estados Unidos. Entre las razones para la producción local intervienen las económicas y también las geopolíticas, pues uno de los objetivos es reducir la dependencia de Asia en este asunto. Se estima que para el año 2025, Europa no necesitará importar baterías de China.
Con este principio de acuerdo, el CEO de Stellantis, Carlos Tavares daba la bienvenida a Mercedes-Benz como socio estratégico que «comparte nuestra ambición de acelerar el liderazgo de ACC». Por su parte, Ola Källenius, CEO de Daimler AG y Mercedes-Benz AG, señalaba que esta nueva asociación les permite «asegurar el suministro, aprovechar las economías de escala y ofrecer a nuestros clientes una tecnología de baterías superior». Recordemos que Mercedes será una marca exclusivamente eléctrica a partir de 2030. Källenius apuntaba que este acuerdo contribuye, además, a que Europa «siga siendo el centro de la industria automovilística, incluso en la era eléctrica».
