No hay día en el que BYD no sea noticia. Lo normal es que el mayor fabricante de coches enchufables del mundo ocupe las portadas ante el lanzamiento de un nuevo producto o una nueva tecnología. La velocidad con la que la empresa trabaja deja en ridículo al resto de sus rivales, pero en esta ocasión el revuelo no se debe a la presentación de un coche nuevo, y eso que acaban de lanzar la actualización del BYD Seal, su berlina eléctrica más importante. En esta ocasión tenemos que hablar de Fang Cheng Bao. La compañía más joven del grupo ha desatado una oleada de críticas al reducir los precios de su único coche a la venta.
Desde principios del año pasado, los mercados internacionales viven una auténtica locura comercial centrada en la movilidad sostenible. De la noche a la mañana Tesla redujo significativamente las tarifas por sus vehículos eléctricos, lo que provocó una respuesta muy positiva en los concesionarios. Animadas por esta política, las marcas chinas siguieron sus pasos con agresivas campañas. El coche eléctrico se ha popularizado en el país gracias a tarifas realmente competentes que sí animan a dar el salto a la movilidad libre de emisiones. BYD es la que más ha hecho por ello. La compañía sigue reduciendo los precios ante cada nuevo lanzamiento.
Casi un 20% menos de la noche a la mañana
Entre sus marcas encontramos algunas propuestas diferentes. YangWang es la división de lujo, mientras que Fang Cheng Bao se centra más en la comercialización de modelos enchufables con grandes capacidades 4x4. Por ahora sólo ofrecen un coche en el mercado, bautizado como Leopard 5. Presentado hace ya un año, el Leopard 5 está considerado como un coche muy atractivo, no sólo por su diseño o sus capacidades offroad, también por su precio de venta. Tras anunciarse la apertura de pedidos, la compañía recibió más de 10.000 solicitudes en apenas tres días. Lo que vaticinó un éxito que hoy está confirmado, aunque ese éxito ha enfadado a algunos de sus clientes.
En los primeros compases de su joven etapa comercial, Fang Cheng Bao anunció un precio de salida de 300.000 yuanes, unos 38.330 euros al cambio de divisa. Es un precio alto para China, pero en Europa un coche similar podría costar más de 80.000 euros. A pesar de ello las ventas van viento en popa, las reservas se acumulan y las entregas se realizan sin sobresaltos, hasta la semana pasada. De la noche a la mañana, la compañía decide reducir el precio de venta en 50.000 yuanes, más de 6.000 euros. Casi un 20% en apenas unas horas. Como es lógico, esto ha enfadado a muchos compradores que de haber aguantado unas horas podrían haberse ahorrado un buen dinero.
Muchos de ellos han presentado quejas ante la compañía. Algunos de ellos han llegado a protestar con pancartas a las puertas de varios concesionarios. Esta campaña puede afectar a las ventas. El mayor rival del Leopard 5 es el Tank 300 desarrollado por Great Wall. Las semejanzas con el Jeep Wrangler son más que evidentes. La comunidad de usuarios de vehículos 4x4 enchufables está creciendo rápidamente en China. La guerra de precios provoca situaciones como esta que si es bien recibida para muchos, no para todos. BYD/Fang Cheng Bao no han dado declaraciones al respecto, aunque deberían corregir los precios de los pedidos realizados para así ajustarse a las nuevas tarifas.
