Que Rolls-Royce se encuentra trabajando en su primer coche eléctrico hasta ahora era un secreto a voces. Sin embargo el CEO de la compañía británica ha confirmado oficialmente tanto la llegada de este coche eléctrico como el nombre con el que será bautizado.
Ha sido en una entrevista con el medio Bloomberg a través de la cual el director ejecutivo de Rolls-Royce Motors Cars, Torsten Müller, quien lleva desde 2010 ocupando este cargo en la firma, ha dejado entrever las primeras pistas fiables acerca del futuro coche eléctrico de lujo de Rolls-Royce.
Anteriormente nos hicimos eco del nombre que estaba tomando fuerza para este primer eléctrico por baterías de la firma británica propiedad del Grupo BMW, pues se filtró a través de la oficina de patentes el nombre de Rolls-Royce Silent Shadow. Y ha sido precisamente esta denominación la que ha sido confirmada por Müller a Bloomberg.
Además, Torster Müller ha comentado que la electrificación es un aspecto que casa perfectamente con los principales atributos de sus coches, pues el silencio y agrado de uso siempre han sido sus mayores señas de identidad.
Decía Müller: "La electrificación encaja perfectamente con Rolls-Royce: tiene par motor y es súper silenciosa". Además, reconocía que en esta transición hacia el coche eléctrico la firma no se tendrá que reinventar, como sí deben hacerlo con otras marcas de coches de lujo y deportivos: "No somos conocidos por ruidoso ruidosos ni ruidos de escape de ningún tipo, y eso es un gran beneficio".
No obstante, lo que no ha confirmado el directivo de origen alemán es cuándo hará acto de presencia el primer coche eléctrico de producción en serie de la compañía, aunque todo parece indicar que será en torno a 2025 cuando será presentada su versión final, si no antes es mostrado algún prototipo o modelo conceptual del Rolls-Royce Silent Shadow.
Otros fabricantes de lujo como Lamborghini y Bentley ya han confirmado que será durante esta misma década cuando lanzarán sus respectivos coches eléctricos, siendo la firma de Crewe la que más prisa se dará en hacerlo, mientras que la italiana aunque haya confirmado que se implica de lleno con la electrificación de su gama, lo hará más paulatinamente.
La electrificación siempre ha estado presente en los planes de Rolls-Royce
Lo cierto es que el plan de lanzar un coche eléctrico, o una versión eléctrica de alguno de sus modelos, siempre ha sido algo que ha estado en la hoja de ruta de Rolls-Royce. De hecho la compañía llegó a mostrar el Rolls-Royce Phantom 102 EX, que en esencia fue un Phantom que fue separado de su V12 y al que se le adaptó un esquema de propulsión con dos motores eléctricos que daban vida al eje trasero, con 145 kW cada uno, y que se alimentaban de un paquete de baterías de 71 kWh.
Rolls-Royce Phantom 102EX.
Más tarde, en 2016, la compañía lanzó el Rolls-Royce Vision Next 100, que aunque no fuera más que un concept car sí que por entonces adelantaba parte de lo que pasará en la gama de Rolls-Royce aproximadamente diez años después, pues era cien por cien eléctrico, además de autónomo.