En el mundo hay muchas marcas, cada día más, pero no todas ocupan un puesto privilegiado en la industria del motor. China crece rápidamente, pero a la hora de hablar de historia, de herencia y evolución siempre acabamos haciendo referencia a Europa, Estados Unidos y Japón. Sin embargo, ahora también tendremos que sumar a Corea del Sur. Hyundai es el principal fabricante del país. Una marca que poco a poco ha ido creciendo y evolucionando hasta convertirse en un gigante. Hoy los coreanos están de celebración. Acaban de alcanzar un gran hito en su historia y lo han hecho superando a grandes rivales.
Corría el año 1967 cuando el mundo vio nacer a la división automovilística de Hyundai. Su logo, una H, simboliza a las dos partes fundamentales de la industria, los clientes y la compañía. Dos personas que se dan la mano. Ese logo ya es famoso en todo el mundo, incluyendo mercados importantes en los que conquistan los primeros puestos en las listas de éxitos. La compañía basa su futuro en la electrificación y ha sido un Hyundai IONIQ 5 el coche que siempre tendrá el privilegio de poder decir que ha sido la unidad 100 millones de la compañía. 100 millones de coches fabricados en 47 años.
Hyundai ha recortado los plazos en medio siglo
Si bien hoy las marcas como Tesla o cualquier empresa china podrán batir dicho registro fácilmente y en un plazo menor, el mundo que hemos conocido en las últimas cinco décadas poco tiene que ver con el actual. La competitividad se ha desatado, los procesos se han optimizado y hoy fabricar un coche es cuestión de minutos, cuando hace unos años era un proceso mucho más artesanal y lento. La planta de Ulsan, la joya de la corona industrial de Hyundai en Corea del Sur ha sido la encargada de producir la unidad 100 millones. A pesar del éxito, los surcoreanos miran al futuro con seguridad y optimismo, sabiendo que pueden enfrentarse a todo lo que se ponga por delante.
Durante estos casi 50 años de vida, Hyundai ha crecido rápidamente en términos anteriores a la explosión de China como gigante industrial. De hecho, tras alcanzar las 100 millones de unidades producidas los coreanos se adentran en un exclusivo y muy privilegiado grupo de marcas. Empresas rivales como Volkswagen, Toyota, Ford o General Motors tardaron casi 100 años en lograr el mismo éxito que ahora celebran en Hyundai. Un tiempo que deja constancia de la rápida evolución que ha sufrido la compañía. Han sabido aprovechar los conocimientos de sus rivales para impulsar su propia estrategia. Ahora el miedo llega desde sus vecinos del sur.
Hyundai seguirá incrementando la producción. Dentro de poco abrirán una nueva planta en Estados Unidos valorada en 7.600 millones de dólares. A pesar de ello, es bastante probable que los nuevos protagonistas de la industria, China, superen rápidamente las cifras de Hyundai y las otras cuatro empresas que han fabricado más de 100 millones de coches en todo el mundo. Sin embargo, por muy rápido que crezcan los chinos, estos no podrán decir que han vivido lo mismo. Las marcas chinas han nacido muy evolucionadas gracias a sus acuerdos de colaboración con fabricantes tradicionales. Hyundai ha vivido su propia evolución, desde una pequeña marca low-cost a un gigante con reconocimiento global.