Tesla es, por derecho propio, el mayor fabricante y el mayor vendedor de coches eléctricos del mundo. La compañía de Elon Musk lleva años de ventaja a sus más inmediatos perseguidores y no sólo en la tecnología de sus coches. Mientras que muchos fabricantes se encuentran adaptando líneas de montaje, las famosas Gigafactorías Tesla alcanzan una increíble velocidad de producción. China se ha destacado por encima del resto. Tal es la precisión del proceso que son capaces de crear un coche en menos de lo que se lee este artículo.
La Giga 3 es la primera de las fábricas de Tesla fuera de Estados Unidos. A escasos días de acabar el 2018, comenzaron las obras de la que hoy es la planta de coches más activa del mundo. Menos de un año después, a finales de 2019, las líneas de montaje ya eran capaces de producir las primeras unidades del Tesla Model 3, lo que de por sí ya fue un verdadero récord de precocidad y velocidad. Desde entonces, la Gigafactoría de Shanghái no ha bajado el ritmo, tal y como demuestran los últimos registros. Sus robots y trabajadores son capaces de producir un coche cada 40 segundos.
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— Tesla Asia (@Tesla_Asia) July 25, 2023
A lo largo de estos años, la planta ha sufrido varias modificaciones que le han permitido depurar y optimizar todo el proceso de ensamblaje, sumando más de un millón de Tesla Model Y fabricados. La presencia de robots de última generación ha posibilitado acelerar el montaje, pero son los trabajadores los que terminan de ensamblar los coches en un procedimiento manual. Aunque el enfoque es bastante conservador, Tesla ha sabido simplificar los pasos, elevando el ritmo de producción a límites insospechados, superando a grandes líderes de producción de la industria, como Ford.
Los de Michigan aseguran ser uno de los fabricantes más rápidos del mundo. Los creadores de la cadena de montaje tienen la capacidad de ensamblar una Ford F-150 cada 49 segundos. Una camioneta que lleva décadas vendiéndose y que tiene una depurada manera de fabricarse. Esa cifra ya ha quedado obsoleta según los datos de Tesla. En lo que llevamos de año, la Gigafactoría de Shanghái ha producido casi medio millón de coches. Vehículos que han acabado en el país o fuera de él, ya que en China se producen muchas unidades que acaban siendo exportadas a otros mercados, como, por ejemplo Europa.
Sin embargo, el éxito es un carril de doble sentido. Si bien Tesla celebra una producción récord, el exceso de coches puede acarrear problemas. Tal es el logro de la primera planta fuera de Estados Unidos que la compañía de Musk quería abrir una segunda en el país, aunque el gobierno estatal no se muestra de acuerdo. China considera que ya hay demasiados coches eléctricos en el país y, puestos a priorizar, prefiere dar ventaja a las marcas locales que a las del extranjero. Por el momento, las negociaciones avanzan a ritmo lento, aunque nadie da por perdido el proyecto.