Tesla está preparándose para que su fábrica europea pueda cumplir con una demanda que aumentará , inevitablemente, de manera notoria como consecuencia de la agresiva bajada de precios que el fabricante efectuó hace tan sólo unos días para sus coches eléctricos más asequibles, los Tesla Model 3 y Model Y.
Así lo informa Automotive News Europe, asegurando que la sección alemana de la marca se encuentra llevando a cabo la contratación de entre 200 y 300 nuevos trabajadores para su planta alemana, situada en Gruenheide, cerca de Berlín. Con ello, la plantilla de Tesla en esta fábrica alcanzaría la cota de los 9.000 empleados.
Cabe destacar que el único modelo que la marca produce en esta factoría, de momento, es el Tesla Model Y, que actualmente tiene en plazo de entrega en España (según la web de la propia Tesla) de enero a marzo de este 2023. Este margen, sin embargo, como ya ha sucedido en Alemania, tendrá que actualizarse, prolongando el tiempo de espera en al menos un mes más.
Está por ver, pues, hasta cuándo puede aumentar Tesla su capacidad de producción. El pasado mes de diciembre, y con vistas a poder cumplir su objetivo de producción anual antes de finalizar el ejercicio, la fábrica de Berlín llegó a las 3.000 unidades por semana, una cadencia que deberá mantener o aumentar si la bajada de precios se traduce en una mayor demanda. Algo que, en base a los primeros informes, parece que se está cumpliendo.
Tesla y MG han descontextualizado el precio de muchos de sus rivales
Tesla ha puesto patas arriba, casi literalmente, el mercado de los coches eléctricos, y con ello ha dejado en la estocada a muchos fabricantes con coches eléctricos de precios elevados. La prueba de ello está en el segmento de los compactos, ya que en su mayoría han quedado en tierra de nadie, atrapados entre el relativamente barato MG4 y el propio Tesla Model 3.
Ahora el modelo más asequible de Tesla es el Model 3 de tracción trasera, que cuesta 46.200 euros, proponiendo 510 kilómetros de autonomía y una potencia de 283 CV. Todo ello con el espacio interior propio de un segmento D y la consabida tecnología de Tesla. El MG4, por su parte, ofrece 450 kilómetros de autonomía en su versión más capaz a cambio de un precio de 37.190 euros. Todo ello antes de ayudas.
Entremedias de ambos modelos quedan coches eléctricos como el Renault Megane E-Tech, cuya versión más básica cuesta prácticamente lo mismo que el MG4, pero se queda en unos vetustos 302 kilómetros de autonomía. Igual sucede al Cupra Born, cuya versión de entrada cuesta 40.100 euros, 3.000 euros más que el MG4 tope de gama, y no consigue siquiera igualar la autonomía del modelo chino.
