Recientemente la firma alemana preguntaba a sus seguidores en uno de los perfiles de sus redes sociales a sus seguidores acerca de su opinión sobre unas recreaciones digitales que acompañaban la cuestión. En las imágenes, el coche que tomaba protagonismo no es otro que el coche eléctrico de la firma, el Volkswagen ID.3 que luce la figura de un compacto descapotable.
Se trata de una publicación que sin duda ha cogido por sorpresa al grueso del público pero que analizando y contextualizando la situación, no parece tan fuera de lugar como a priori pueda verse. Y es que no es el primer cabrio con el que Volkswagen sorprende a todos, ya que actualmente en su gama oferta el Volkswagen T-ROC Cabrio; un SUV, de tres puertas y descapotable. Tres conceptos en uno que no están acabando de cuajar comercialmente.
Sin embargo, y dado todo el potencial de la gama ID. de eléctricos de Volkswagen, sumar un descapotable eléctrico gozaría todo el sentido dado que si Volkswagen quiere seguir ampliando su oferta de carrocerías en formato eléctrico, un descapotable tiene todo el derecho a ganarse su parcela de mercado.
La empresa alemana acompañaba las imágenes que ilustran este artículo con el siguiente texto: "¿Y sobre esto? Un convertible ID.3 sería realmente atractivo: disfrute de la naturaleza eléctrica a techo abierto. Todavía estamos pensando en cómo ese concepto podría convertirse en realidad. Nuestro diseño ya tiene ideas iniciales. Pero la pregunta más emocionante es: ¿qué opinas? ¿La conducción eléctrica y el techo abierto van de la mano?"
Vista del tres cuartos trasero del Volkswagen ID.3 descapotable, aún como render digital.
Las imágenes no son más que unos sketches digitales en los que se muestra un ID.3 que por el camino a la conversión ha perdido el par de puertas trasero, además de, obviamente, el techo. Se aprecia una pronunciada línea descendente, especialmente desde el tres cuartos trasero, desde la parte alta de los pilotos traseros hacia la delantera, lo que le confiere un aire musculoso.
Sobre esta línea de carácter, en la zaga se han reservado un guiño al Volkswagen Golf Kharman, el clásico Golf descapotable de segunda generación. Este, cuando se descapotaba plegaba su techo sobre el portón del maletero, confiriendo al coche una imagen acuñada principalmente otorgada por todo el volumen acumulado sobre la zaga del mismo. El ID.3, potencialmente, plegará su techo en el espacio disponible en el maletero, pero los diseñadores se han permitido el lujo de "levantar" la carrocería en la trasera del coche para hacer el guiño al Kharman.
Sobre si tiene sentido o no lanzar un coche eléctrico descapotable, lo cierto es que atendiendo únicamente a la parte eficiente de la pregunta lo cierto es que no; pesará más y en la vertiente aerodinámica no será tan efectivo como el compacto. Pero lo cierto es que, como hemos comentado al principio de este artículo, si Volkswagen va a lanzar una gama plena de eléctricos y el sector se encuentra en pleno giro a favor del coche eléctrico, lo cierto es que tiene mucho sentido que quieran ser los que inauguren este nicho de mercado.