MAHLE ha presentado un nuevo condensador para coches eléctricos e híbridos enchufables que permitirá aumentar con seguridad la potencia de carga de estos vehículos. Este nuevo condensador ofrece una densidad de potencia significativamente mayor que los modelos actuales, de manera que proporciona mayor capacidad de refrigeración y permite mantener a raya la temperatura de las baterías durante las cargas rápidas.
Durante las recargas rápidas, la intensidad de corriente eléctrica es tal que se alcanzan temperaturas excepcionalmente altas en el sistema eléctrico -o mejor dicho, se alcanzarían, ya que para evitarlo se instalan circuitos de refrigeración-. Es el llamado efecto Joule: si circula corriente eléctrica por un conductor cualquiera, parte de la energía cinética de los electrones se transforma en calor, lo que eleva la temperatura.
Procurar que la temperatura se mantenga en unos márgenes controlados es fundamental para el rendimiento y la seguridad de las baterías, y el nuevo condensador presentado por MAHLE promete enfríar la batería de manera más rápida y eficiente. Al mismo tiempo, este dispositivo también proporciona suficiente capacidad de refrigeración como para enfriar el habitáculo del coche sin requerir más espacio de instalación en el coche.
Este nuevo condensador se ha diseñado de forma que es más ligero que los anteriores, es menos susceptible a la corrosión y además requiere menos refrigerante circulando por el circuito. Todo ello sin que requiera más espacio para su instalación en el coche.
Su mayor potencia de enfriamiento permite incrementar la potencia de carga del coche eléctrico (o híbrido enchufable), lo que redunda en una recarga más rápida. Dado que la carga rápida es un factor clave en la aceptación de los vehículos eléctricos actualmente, MAHLE cree que su nuevo condensador puede contribuir a conseguir mejoras en este sentido, haciendo que la movilidad eléctrica adquiera mayor acogida por el mercado para un uso diario.