Bird es uno de los proveedores más importantes de servicios de movilidad en todo el mundo. Sus bicicletas y sus patinetes eléctricos están presentes en diferentes ciudades del mundo incluida España, donde operan en ciudades como Madrid, Málaga, Tarragona, Tres Cantos o Alcalá de Henares.
A pesar de que su línea de negocio principal está asociada con el alquiler de patinetes y bicicletas eléctricas en entornos urbanos, Bird también se dedica al diseño de sus propios vehículos y, en ciertos casos, los pone a disposición de los consumidores. El éxito de las bicicletas eléctricas de VanMoof, hizo que su diseño se inspirase en ellas, hasta tal punto de que las similitudes eran evidentes. Sin embargo, la quiebra de la compañía de Países Bajos ha provocado que sus bicicletas eléctricas cambien de estilo.
Lo más lejos posible de que le relacionen con una bancarrota
Recientemente, Bird ha presentado sus nuevos modelos que destacan por una clara renovación en su diseño y concepción, lo que parece una clara intención de eliminar todo rastro de parecido con el fabricante que hasta ahora le había servido de inspiración. De hecho, sus bicicletas han sido objeto de críticas por su similitud con los diseños de VanMoof,
La empresa neerlandesa detuvo abruptamente las ventas de sus bicicletas eléctricas para posteriormente declararse en bancarrota. Aunque las últimas informaciones sugieren que podría ser rescatada por Lavoie, la división de scooters eléctricos vinculada a McLaren Applied, Bird ha decidido alejarse todo lo posible de lo que rodea a este caso. Por eso, sus nuevas bicicletas han adoptado, ahora sí, identidad propia.
Presentadas en la exposición comercial MicroMobility America, los nuevos modelos de Bird se centran en dos plataformas, Cuadro A y Cuadro V, y en ambos casos su diseño mantiene los entornos urbanos.
Desarrolladas en asociación con Tradehubb y Spring, están construidas en un aluminio ligero y equipan componentes de calidad suministrados por fabricantes de reconocido prestigio dentro del mercado. Así, por ejemplo, la transmisión, de siete velocidades, corre a cargo de Shimano. En la web de uno de sus colaboradores es posible encontrar más información e incluso apuntarse a una lista para saber las últimas novedades. Allí aparecen algunas características extra, aunque realmente todavía no se han revelado los precios y las especificaciones de cada variante.
Además de un sistema de transmisión por correa, el sistema eléctrico de asistencia ofrece un motor de 500 W (en Europa se limitará a 250 W para cumplir con la normativa) que se alimenta mediante una batería de 48 voltios y 10,5 Ah, lo que se traduce en 504 Wh de capacidad y una autonomía de 80 km. Cuentan con las certificaciones que aseguran que la batería y la transmisión cumplen con los estándares de la industria.
Bird añade que sus nuevas bicicletas eléctricas disponen de una serie de tecnologías que mejoran la seguridad, entre ellas un sistema con una alarma de 120 decibelios que también es capaz de rastrear su ubicación. También incluyen frenos de disco con accionamiento hidráulico e iluminación integrada, tanto en la parte delantera como en la trasera. En el manillar, una pantalla LCD en color ayuda a los ciclistas a monitorear los datos más relevantes durante sus desplazamientos.
Por ahora, esta es toda la información que se conoce antes de que Bird revele todos los detalles de sus nuevas bicicletas eléctricas que podrían estar disponibles tanto para la venta como para el servicio de alquiler en la primavera de 2024.