Tesla ha demostrado que hay vida más allá de la venta de coches eléctricos. Los negocios paralelos de la compañía dirigida por Elon Musk proporcionan enormes beneficios. Además de la venta de derechos de emisión a otros fabricantes, los de Austin ganan miles de millones con su extensa y fiable infraestructura de recarga. Ese éxito ha servido para que en 2017 varios fabricantes europeos uniesen fuerzas para crear Ionity, la red de carga para vehículos eléctricos de Europa. Hoy, la compañía crece rápidamente y ya celebra la instalación de 600 estaciones de carga en todo el territorio. Un gran momento que celebraron a mediados del año pasado con una rebaja en las tarifas oficiales.
Pocas veces en la industria hemos visto una alianza de esta magnitud. Hace ya siete años varios fabricantes europeos unieron fuerzas con el objetivo de expandir el mercado eléctrico. BMW, Mercedes, Ford y el Grupo Volkswagen firmaron una joint-venture a partes iguales para intentar plantar cara a la red de supercargadores de Tesla.
En 2020 el Grupo Hyundai se unió a la familia y, desde entonces, los puntos de carga no han dejado de crecer. Hoy están presentes en 24 países de la Unión Europea, incluyendo a España. Miles de puntos al alcance de miles de usuarios de vehículos eléctricos.
Más puntos, más avanzados y potentes con un precio más competitivo
El hito de 600 estaciones de carga operativas se alcanza apenas dos años después de superar la barrera de las 400 estaciones. En total se contabilizan 3.382 puntos de carga rápida. Son muchos más de los 400 puntos iniciales con los que arrancó la compañía.
A finales de 2021, Ionity anunció una segunda fase de expansión con un enfoque algo diferente. En aquel entonces, decidió que no sólo las vías principales debían beneficiarse de la red de carga y, gracias a ello, hoy podemos recargar en puntos de la red secundaria. Puntos de alta potencia, hasta 350 kW, que permiten recuperar la vida de la batería en cuestión de minutos.
Durante una entrevista a Allard Sellmeijer, country manager de Ionity para España y Portugal, descubrimos que la potencia de carga es una de las mayores ventajas y fortalezas de la empresa. Actualmente, Tesla está instalando los famosos V4 capaces de superar la barrera de los 250 kW.
Otra cualidad positiva es la integración del sistema Plug & Charge que facilita la rápida conexión entre el coche y el punto de carga. Aún así, todavía queda un largo camino de homologación por parte de la industria. Los conductores necesitan más sencillez en todo el proceso y un ritmo acelerado en cada uno de los pasos determinantes.
A corto plazo, Ionity tiene ambiciosos planes de expansión. Esperan cerrar el presente año con un crecimiento significativo. Para 2025 esperan poder alcanzar las 1.000 estaciones de carga por toda Europa con más de 7.000 puntos de carga en total. Todo ello permitirá que los conductores europeos tengan más confianza y garantías a la hora de emprender largos viajes con sus coches eléctricos.
Sin embargo, Ionity se enfrenta a una competencia cada vez más numerosa. Otras infraestructuras de carga internacionales también están logrando hitos importantes. La última de ella, Fastned, acaba de inaugurar su primera estación de carga en España.