La vida es evolución. La industria del automóvil ha evolucionado más en las últimas dos décadas que en los 100 primeros años de su historia. Tras desbancar al caballo como el mejor medio de transporte del mundo, vivimos en una era de constantes cambios. Varios son los frentes abiertos con la movilidad del futuro, la sostenibilidad y la conducción autónoma. Cuando juntamos ambos universos el resultado son los robotaxis. El sueño de los primeros novelistas de ciencia ficción que está a punto de convertirse en realidad. Muchas son las empresas que pelean por conquistar el mercado y China parece haber asestado un golpe letal.
Durante mucho tiempo, Estados Unidos parecía llevar la delantera en esta particular carrera tecnológica. Muchas empresas de Silicon Valley han invertido grandes sumas de dinero en desarrollar coches capaces de recorrer nuestras carreteras de forma autónoma. Ciudades como San Francisco llevan años disfrutando de servicios de movilidad autónoma, aunque el resultado no siempre ha sido satisfactorio. Tesla también está empeñada en liderar la transición tras haber demostrado al mundo que es posible fabricar coches eléctricos y ganar dinero. Hace apenas unas semanas, Elon Musk anunció que el próximo 8 de agosto desvelará al mundo su primer robotaxi.
China lidera la carrera por la movilidad autónoma
Se trata de una apuesta muy importante. Tesla parece haber confiado su futuro más inmediato a la tecnología autónoma. Tras haber retrasado el desarrollo de su coche más barato y pequeño, la inversión se ha centrado en una tecnología que, según el propio Musk, podría darles más beneficios que los coches. En apenas tres meses saldremos de dudas, pero una cosa está clara, China se ha adelantado. La compañía Baidu es una de las más importantes en esta carrera. Lleva años trabajando en la materia, asociándose con grandes empresas como Volvo.
Acaban de presentar la última versión de su producto estrella. La sexta generación de un vehículo con altas capacidades de conducción autónoma. El nuevo Baidu RT6, así se llama la criatura, ofrece un nivel 4 de conducción autónoma. Viene equipado con 5 radares LiDAR y un total de 40 sensores de 7 categorías diferentes repartidos por toda la carrocería. Es capaz de detectar obstáculos y problemas a una distancia máxima de 440 metros. En su interior se esconde una potencia computacional sin parangón, 1200 TOPS. Para comprender la dimensión de este dato basta decir que Microsoft acaba de marcar la pauta de los primeros ordenadores personales con IA con una potencia computacional de 40 TOPS.
Su forma natural, parece un coche más dentro del tráfico urbano, muestra una configuración interior muy amplia gracias a sus 4,76 metros de largo y 2,83 metros de distancia entre ejes. Está propulsado por un motor eléctrico de 110 kW capaz de desarrollar una velocidad punta de 135 km/h. Se alimenta de una batería LFP desarrollada por BYD cuya capacidad es desconocida. Su paquete de baterías es intercambiable, por lo que el RT6 puede recuperar el 100% de su autonomía en cuestión de unos pocos minutos. Los cuatro pasajeros del interior pueden disfrutar de muchas comodidades tales como superficies de trabajo o módulos de infoentretenimiento.
El objetivo de Baidu es desplegar 1.000 robotaxis por las calles de Wuhan antes de cerrar el año. Apollo Go es la empresa encargada de operar la flota, pero también están abiertos a vender su producto a otras empresas. El coste es realmente interesante. Según Baidu el coste de venta es de apenas 204.600 yuanes, poco más de 26.000 euros al cambio de moneda. Por ese precio en España apenas puedes acceder a un compacto generalista. Todavía quedan por confirmar muchas dudas al respecto del próximo gran lanzamiento de Tesla. Durante años, la empresa dirigida por Elon Musk ha prometido importantes avances. De no cumplir las expectativas, la compañía podría hacer frente a un curso mucho más complicado del que ya se prevé a tenor de los resultados cosechados en el primer trimestre.