Las opiniones de cada uno son eso, opiniones personales. Para aquellos que no lo conozcáis, Sandy Munro es uno de los ingenieros más conocidos de la industria automotriz americana. Tras trabajar 10 años en la Ford Motor Company mejorando los métodos de ensamblaje de los motores, en 1988 creó su propia consultoría de ingeniería, Munro & Associates en Michigan. Desde entonces se ha establecido como una voz autorizada y reputada en la industria. En los últimos años, Munro ha dirigido toda su atención a los coches eléctricos, desmantelando cientos de ellos con sus propias manos para conocer la ingeniería oculta.
Gracias a esa experiencia acumulada y a los detallados trabajos de desmontaje que realiza, el señor Munro se encuentra en una posición privilegiada para comentar diversos aspectos del mundo del motor. La movilidad eléctrica en Estados Unidos está creciendo rápidamente, múltiples compañías y muchos coches vaticinan un futuro prometedor, pero no para todo el mundo tal y como comenta el propio Sandy. El ingeniero ha dejado muy claro que tres son las marcas que van a seguir con vida en la transición a la movilidad 100% eléctrica americana.
Una es, obviamente, Tesla. Los de Austin ocupan una posición de privilegio a nivel mundial. Fueron los pioneros en el campo de los coches eléctricos y a día de hoy sus modelos son altamente demandados en todo el mundo. En Estados Unidos su cuota es muy superior a la del resto de rivales, aunque Munro reconoce que hay otras empresas que pronto podrán plantarle cara. Ford es una de esas compañías. La firma dirigida por Jim Farley está haciendo bien las cosas a ojos del propio Sandy. El peso y el poderío de la Ford Motor Company le permitirán sobrevivir en esta nueva etapa de transición.
Si bien los dos primeros puestos estaban más que claros, la tercera opción del Sandy Munro nos ha dejado un poco descolocados. El experto en eléctricos considera que la tercera y última compañía en sobrevivir será Rivian. Sí, como lo estás leyendo. La compañía de RJ Scaringe pasa por un momento muy delicado. En los últimos meses la capitalización de la empresa ha perdido gran parte de su interés para los especuladores. Los problemas financieros son el pan nuestro de cada día, aunque el señor Munro da sus razones para confirmar a la empresa californiana como una de las tres que van a sobrevivir.
Hace tiempo, Munro consiguió hacerse con una Rivian R1T con la intención de desmantelarla hasta su chasis, algo que hace con todos los eléctricos que caen en sus manos. Sin embargo, sorprendido por la calidad del producto decidió quedársela durante una temporada, aunque finalmente no pudo contener los impulsos y acabó por desnudarla al completo. Una vez más la sorpresa fue la calidad en la ingeniería y la tecnología, llegando a reconocer que como vehículo el R1T debería valer más de 100.000 dólares.
Con esas premisas el señor Sandy Munro vaticina un futuro muy complicado para el resto de marcas en Estados Unidos. Aunque se trata de una opinión personal, el experto ingeniero se ha dejado en el tintero grandes corporaciones que están invirtiendo ingentes cantidades de dinero en el mercado eléctrico, como es el caso de General Motors, que recientemente ha anunciado su intención de bajar el precio de los eléctricos. Grandes inversiones que no tienen mucho valor para Munro, que parece centrarse más en el aspecto técnico e ingeniero que en el valor de la compañía y la capacidad de producción en sí.