La nueva Velca Vortex lleva poco tiempo en el mercado y, según la firma, está teniendo una acogida muy importante. Dicen que, en solo 20 días, han recibido más de 80 reservas del modelo.
Echando un vistazo a la Vortex, podemos adivinar que una de las razones de este temprano éxito sea su estética: no da la sensación de que estemos ante un motocicleta eléctrica que equivale solamente a un modelo de 125 cc. Sus dimensiones son las de una moto de mayor envergadura y la estética está totalmente en consonancia con lo que se espera de una motocicleta custom.
Realmente se puede conducir con el carné de coche
La Velca Vortex es una equivalente a las motos de 125cc (es de la categoría L3e). Así que se puede conducir con el carné de coche B (con 3 años de antigüedad). Esto es, posiblemente, otro de los motivos por el que la Vortex está siendo tan demandada.
El motor ofrece una potencia nominal de 8 Kw que puede dar picos de hasta 13 Kw. Esto permite a la Velca Vortex ser lanzada hasta los 130 km/h.
La batería, por su parte, tiene 8,2 Kwh de capacidad lo que, en las mejores condiciones, hace que la autonomía máxima declarada sea de 180 km. Con el cargador rápido de 72V/25Ah, el tiempo de recarga se estima en 4,5 horas.
Una custom en toda regla
El cuadro de la Vortex es un doble cuna de acero aunque está ‘vestido’ de tal manera que no se deja ver. En la minimalista carrocería destaca el falso depósito (bajo el tapón está la toma de carga) con forma de lágrima característico de las motos custom.
Las ruedas albergan unos neumáticos de grandes dimensiones que realzan la imponente silueta de la Vortex: delante se monta una goma de 120 y detrás de 150. Los frenos de disco incorporan ABS y la suspensión se confía al característico doble amortiguador de muelle en la rueda trasera y a una moderna horquilla invertida en la rueda delantera.
La apariencia de moto más grande no solamente se ve reflejada en la estética: en el peso también se pasa la ‘factura’, con una masa total declarada de 196 kg.
De serie la Vortex es una motocicleta monoplaza, destacando por su belleza el sillín con el pequeño colín. Ahora bien, si lo deseamos, se puede pedir con un doble asiento y respaldo para el pasajero.
Hasta ahí las características más clásicas del custom. Porque esta Vortex también incluye guiños a la más moderna tecnología. Por ejemplo, destaca el bonito faro delantero con tecnología led y luz de día.
Por otro lado, el cuadro de instrumentos es una pantalla circular TFT de 5 pulgadas con conexión Bluetooth e incluso Wifi. Se ha dispuesto también de tomas USB C y A para cargar dispositivos móviles. Esta gran conectividad (que también podemos controlar con nuestro Smartphone) hace que dispongamos de un sistema de alarma y de que podamos arrancar la Vortex en remoto.
Destacan, como en las mejores motos del mercado, los mandos retroiluminados que nos permiten manejarlos con facilidad cuando la noche cae.
La podemos pre-reservar desde ya
De momento no se han entregado unidades. Es más, en nuestro país hay solamente dos modelos (pre-serie) que van a ir recalando en distintas localidades para que, quien quiera, pueda probarlas (en la página web del fabricante podemos ver el ‘planning’ de ambas monturas).
La pre-reserva se realiza mediante un adelanto de 600 euros y eso nos beneficia de un precio de lanzamiento de 7.290 euros que incluye de serie distintos accesorios que más adelante estarán únicamente disponibles como opción (y con su correspondiente sobrecoste): el asiento doble, el respaldo del pasajero, un caballete exterior y el envío a la tienda que deseemos.
Más información en: Velca Vortex