El ferry híbrido 'Berlin', que opera en la ruta Rostock-Gedser entre Alemania y Dinamarca, ha sido dotado de un sistema de propulsión híbrido que utiliza el viento para reducir el uso de sus motores diésel. La tecnología Rotor Sail de Norsepower se basa en el efecto Magnus que aprovecha la velocidad del viento para generar un empuje horizontal que permite reducir sus emisiones en un 4 % de media y hasta en un 20 % en condiciones ideales.
Scandlines es una compañía de ferry que opera las rutas de ferry Rødby – Puttgarden y Gedser – Rostock entre Dinamarca y Alemania. Posee siete ferries, de los que seis ya son híbridos. Desde 2013, ha invertido más de 300 millones de euros en la construcción y conversión de transbordadores convencionales en transbordadores híbridos. Esta estrategia forma parte de su objetivo: ser libre de emisiones para 2040.
La naviera se ha fijado objetivos más altos que los establecidos en el Acuerdo de París. En 2020, agregó la tecnología de propulsión eólica respetuosa con el medio ambiente a su lista de iniciativas ecológicas e instaló un Rotor Sail de la empresa finlandesa Norsepower en el ferry híbrido 'Copenhague', que opera en la ruta Rostock-Gedser entre Alemania y Dinamarca. La vela ha reducido las emisiones de CO2 del ferry en un promedio del 4 %. En condiciones óptimas de viento, la reducción puede llegar al 20%.
El 16 de mayo de 2022, Scandlines instaló el Norsepower Rotor Sail en otro ferry híbrido, el 'Berlin' en el puerto de Rostock. El Rotor Sail es un cilindro giratorio de 30 metros de altura que se basa en una versión modernizada del rotor Flettner. Los cilindros giratorios aprovechan la energía eólica e impulsan el barco gracias al efecto Magnus. Un cuerpo giratorio que se mueve rodeado por un fluido circundante, en este caso aire, está sujeto no solo a ser arrastrado, sino también a elevarse. A medida que aumenta su velocidad de giro, en ángulo recto con respecto al flujo, la presión disminuye en el lado del cilindro donde se combinan el flujo natural y el flujo inducido por el giro.
El empuje inducido por el efecto Magnus se puede utilizar en la propulsión del barco mediante un sistema de accionamiento eléctrico variable, alimentado por la red de baja tensión del barco. Cuando el viento se encuentra con la vela giratoria del rotor, el flujo de aire se acelera en un lado de la vela y se desacelera en el lado opuesto. El cambio en la velocidad del flujo de aire da como resultado una diferencia de presión, según el teorema de Bernoulli, lo que crea una fuerza de sustentación que es perpendicular a la dirección del flujo del viento. Cuando las condiciones del viento son favorables, se reduce la carga de los propulsores principales. Esto permite una reducción en el uso de motores diésel, en el consumo de combustible y en las emisiones asociadas. Ya que el viento genera un impulso adicional, la solución es compatible con todas las demás tecnologías de ahorro de emisiones.
La vela de rotor de Norsepower está completamente automatizada. El sistema mide la velocidad y dirección del viento y calcula si el uso de Rotor Sail reducirá las emisiones. Si es así, la vela arranca automáticamente. Sin embargo, para áreas portuarias específicas que no son aptas para el uso de velas, Rotor Sail incorpora configuraciones que garantizan que la tecnología no se activa.
"Después de la experiencia positiva con el Rotor Sail en el ferry híbrido Copenhague, Scandlines preparó su ferry gemelo 'Berlín' para recibir el Rotor Sail", explica Michael Guldmann Petersen, director de operaciones de Scandlines. "Nos complace ver que la instalación se completó con éxito y que el ferry volvió a funcionar según lo planeado". Tuomas Riski, director ejecutivo de Norsepower añadió que "la expansión del uso de la tecnología Rotor Sail en un segundo buque de Scandlines destaca la viabilidad de la energía eólica y la importancia de los ahorros de emisiones que se pueden lograr".