El consejero delegado de Tesla, Elon Musk, no quiso perder la oportunidad de su última intervención pública para precedir la futura crisis global. Unas declaraciones rodeadas de polémica, como tantas otras que genera en conferencias a las que asiste, o a través de publicaciones en su red social X.
En esta ocasión, sus últimas palabras, y que han alertado a algunos círculos, las ha pronunciado durante la charla del Bosch Connected World, a la que asistió, aunque de manera virtual. Allí soltó una buena retahíla de reflexiones y pensamientos sobre el futuro próximo de la tecnología y adelantó lo que, para él, será el motivo de una nueva e inminente gran crisis mundial.
En la conferencia se han tratado temas tan importantes como el poder de la inteligencia artificial o IA, cuyo desarrollo no para de crecer en tiempo récord, lo que dará lugar a retos nunca vistos en el mundo a corto o medio plazo.
Las razones de Elon Musk que respaldan esta afirmación
Musk aseguró que "estamos al borde de la mayor revolución tecnológica" y puso sobre la mesa una situación de demanda de chips actual que supera a "cualquier fiebre del oro", de cuantas hayan existido en la historia.
Si bien hemos estado sumidos en una escasez de microchips, por razones entre las que se incluyen la pandemia a nivel global de 2020, para Elon Musk lo siguiente será una crisis energética.
Es decir, que, con una inteligencia artificial "multiplicándose por diez cada seis meses" y un más que obvio crecimiento en paralelo de la movilidad eléctrica, pronto se empezarán a notar los efectos de una demanda de energía que no para de aumentar.
Hace referencia a una falta de electricidad como el siguiente paso tras la falta de chips de red neuronal, seguida de la de transformadores de voltaje, algo que limita y limitará el desarrollo y programación de sistemas basados en la inteligencia artificial.
¿Cuándo llegará la crisis energética mundial?
Musk cree que ya en 2025 llegará un punto en el que "será imposible producir la electricidad necesaria para alimentar a todos los chips" ya que, junto con el gran número de vehículos eléctricos que habrá en el planeta, la demanda será excesiva e inviable de cubrir.
A estas declaraciones, también sumó otras el futuro de Tesla en la red social X, en la que acostumbra a hacer polémicas intervenciones y a dar opiniones que gustan más a o menos en el sector, pero también anuncios interesantes sobre Tesla. Por ejemplo, hace unos días prometió la llegada el año que viene del Tesla Roadster, que debería llevar en las carreteras desde 2020.
Además, aseguró que sus prestaciones van a mejorar bastante respecto a las anunciadas inicialmente, a destacar una aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora en menos de un segundo, sumada a la autonomía de 1.000 kilómetros por carga que ya conocíamos.
Musk también habló sobre su proyecto espacial SpaceX, que está colaborando en el desarrollo del Roadster, con un sistema de cohetes que permitirá al automóvil 100% eléctrico cumplir con la promesa de aceleración récord. Lo hará, en todo, caso, en una versión tope de gama y especial, que prescindirá de la fila de asientos traseros para poder integrar dicho sistema.
