Tesla inspira a Lightyear: de coches eléctricos a paneles solares

Los planes no siempre salen como uno hubiese querido. La competencia en la industria automovilística está causando estragos entre los fabricantes más jóvenes que no consiguen abrirse hueco.

Apenas un puñado de unidades del Lightyear One salieron de la línea de montaje.
Apenas un puñado de unidades del Lightyear One salieron de la línea de montaje.
06/10/2023 09:49
Actualizado a 07/10/2023 13:04

Cuando decimos que Tesla lo ha cambiado todo es porque los americanos no sólo han transformado la industria del automóvil, sino que también han abierto la puerta al sueño de muchos pequeños fabricantes por hacerse un hueco en el sector. En una industria tan clásica y anclada en el pasado, la llegada de nuevos actores no es acogida con los brazos abiertos. Las nuevas compañías sufren ante tanta competencia y, en muchos casos, la historia no acaba bien. Lightyear es uno de esos casos. La empresa holandesa se rinde definitivamente y pasará de diseñar coches eléctricos a fabricar paneles solares.

Esta es una historia con muchos altibajos. Lightyear se fundó con la intención de ser una alternativa real a las marcas más habituales. Su planteamiento único se basaba en el empleo de paneles solares para extender al máximo la autonomía de un coche eléctrico. Durante años el equipo de desarrollo se fue ampliando gracias a unas inyecciones de capital que surgían como de la nada alentadas por la buena pinta del proyecto. Sin embargo, las cosas no tardaron en torcerse. Lightyear no sólo no era capaz de cumplir con los plazos, sino que su objetivo de fabricar un coche barato se diluía rápidamente.

Lightyear One Trasera
El Lightyear One prometía hasta 800 kilómetros de autonomía en condiciones ideales.

Lightyear no desaparece, pero sí se reubica en la industria

Lightyear presentó el One con la intención de lanzarlo al mercado en el año 2020, algo que jamás ocurrió. Tampoco se presentó como un coche barato y popular. Las primeras unidades tenían un coste de venta superior a los 150.000 €. Si bien la producción llegó a arrancar, apenas unos días después la línea de montaje se detuvo porque no había pedidos ni coches que ensamblar. Tampoco había dinero con el que trabajar y, tras buscar alternativas, la compañía se declaró en quiebra a principios de este año. Todas las operaciones quedaron paralizadas hasta encontrar un nuevo inversor.

Con el paso de los meses, la cúpula directiva de Lightyear trató de buscar financiación promocionando el proyecto del Lightyear 2. Un coche eléctrico con paneles solares que, ahora sí, sería barato. Su salida al mercado estaba programada para el 2025, pero dado el historial de incumplimiento de la compañía, nadie ha decido apostar por ese rumbo. Para seguir con vida, la empresa holandesa acaba de anunciar que rechaza la idea de fabricar coches, al menos por ahora. Cambiará su enfoque comercial y se centrará en el negocio de los paneles solares.

Esta idea no es nueva en el sector. Hace poco tiempo, Sono Motors, otra joven compañía de coches eléctricos solares, tuvo que reconducir su estrategia con el objetivo de no desaparecer del mercado. Está claro que ni los inversores ni el mercado demandan, por ahora, coches de este tipo. A pesar de que Lightyear abandona los planes de fabricar coches propios, los paneles que diseñará a partir de ahora acabarán montados en otros coches de la competencia. Lex Hoefsloot, director ejecutivo y cofundador de la empresa, ha sido el encargado de anunciar el nuevo rumbo, dejando abierta la puerta de convertirse en un fabricante de coches.