Desde hace unos años, los coches voladores y los vehículos denominados eVTOL, se han convertido en opciones con una gran proyección en el futuro. Las tecnologías han mejorado notablemente para posicionarse como alternativas interesantes en el plano de las ciudades. La principal particularidad de la mayor parte de los proyectos que están desarrollándose es el despegue y aterrizaje vertical. Esto facilitaría su desempeño en el ámbito urbano. Ahora bien, ¿hasta qué punto tendrá viabilidad comercial este sector en los próximos años?
Una universidad acaba de lanzar un curso especial destinado, principalmente, a ingenieros, diseñadores y futuros pilotos. Se trata de una formación que tiene como objetivo dotar de conocimientos sobre la materia ante la inminente explosión del mercado hacia esta dirección. Las estimaciones apuntan a que las inversiones en esta peculiar industria para el año 2040 serán de 2,3 mil millones de dólares, de acuerdo con Morgan Stanley. ¿Ha llegado el momento de formar a los futuros empleados en esta ramificación de la industria aeronáutica?
Los coches voladores ya interesan a la universidad y formación especializada
Los coches eléctricos han pasado de ser una utopía a una alternativa con un gran potencial en los próximos años. En el mercado actual apenas hay proyectos con un gran desarrollo detrás. Sin embargo, algunos de los más ambiciosos ya han podido completar rutas completas en el aire. La falta de autonomía sigue siendo el talón de Aquiles de la tecnología eléctrica y, por supuesto, esto afecta a su rendimiento más allá del asfalto.
La Universidad Real Instituto de Tecnología de Melbourne (RMIT por sus siglas en inglés) lanzará próximamente un curso centrado, particularmente, en la dotación de aptitudes relacionadas con este tipo de nueva movilidad. Denominado Flying Car and Autonomous Flight Engineer, tendrá una duración completa de cuatro meses. Durante ese tiempo, se pondrá a disposición del alumnado toda una serie de habilidades que deberían permitir la realización de todo tipo de proyectos centrados en la industria.
El precio de la formación será de unos 2.000 dólares, debido, en cierto modo, a la participación de Udacity en el proyecto. Tiene por objeto cubrir una serie de asignaturas próximas al desarrollo de esta tecnología potencial. Entre ellas, cabe hacer especial mención al diseño 3D, una herramienta que no para de ganar influencia desde hace unos años.
No es la primera vez que vemos cómo el RMIT organiza planes de formación centrados en la economía del futuro. Entre la increíble oferta que hay disponible en esta escuela, cabe hacer especial mención a los programas especializados en inteligencia artificial ética, piratería ética y aprendizaje profundo.