La Junta de Recursos del Aire de California (California Air Resources Board, CARB por sus siglas en inglés) propondrá la aprobación de un nuevo reglamento que afectaría a los 13 aeropuertos del estado para que los servicios de traslado que realizan las flotas públicas y privadas se realicen con vehículos cien por cien eléctricos en 2035. Esta nueva normativa afectará a los operadores de los estacionamientos, las agencias de alquiler de automóviles y los hoteles próximos que deberán utilizar vehículos eléctricos de batería o alimentados por pila de combustible de hidrógeno.
El propósito del reglamento también incluye la expansión de la infraestructura de recarga y de la red de abastecimiento de hidrógeno. Además, aumentará la concienciación de los consumidores y la visibilidad pública de los vehículos cero emisiones para respaldar la transferencia de la tecnología a otros sectores. Según afirma la CARB también contribuirá a cumplir sus objetivos de calidad del aire y el cambio climático al aumentar el uso de vehículos de cero emisiones en el sector de carreteras de servicio mediano y pesado.
Los requisitos propuestos deberán ir cumpliéndose según una serie de fases descritas en el nuevo reglamento. En una primera etapa se requerirá que al menos el 33% de la flota sea cero emisiones antes del 31 de diciembre de 2027. Posteriormente, antes del 31 de diciembre de 2030, se alcanzará al menos el 66% y, por último se alcanzará un 100% el 31 de diciembre de 2035.
Actualmente, en los 13 aeropuertos más grandes de California operan casi 1.000 autobuses públicos y privados, que son propiedad de agencias gubernamentales locales o empresas concesionarias. La mayoría de ellos funcionan con gasolina, diésel y gas natural comprimido, y en menor medida, electricidad y propano.
Según la CARB, entre 2020 y 2040 la nueva regulación reducirá las emisiones de gases de efecto invernadero en 500.000 toneladas de CO2, 138 toneladas de NOx y 2,5 toneladas de PM2.5 (partículas en suspensión de menos de 2,5 micras) en relación con los valores actuales.
El desarrollo del Reglamento propuesto por la CARB es fruto de un extenso proceso público que ha durado dos años y ha tenido en cuenta los comentarios de todas las partes interesadas, los resultados de las encuestas y el análisis de los datos.
La Junta de Recursos del Aire de California aprobó hace unos días la obligatoriedad de que, a partir de 2029, todos los nuevos autobuses que se adquieran para dar servicio en el interior del territorio del estado sean completamente eléctricos, con el objetivo de que en el año 2040 su flota de transporte público esté completamente libre de emisiones.