A pesar que desde fuera, Noruega solo puede calificarse como un paraíso para los coches eléctricos, parece ser que desde dentro las cosas no son tan bonitas como parece. "La política de vehículos eléctricos de Noruega es incómoda e irrespetuosa" ha afirmado la NAF, la Asociación automovilística noruega (Norges Automobil Forbund). El gobierno no ha tardado en rechazar las críticas: "tenemos la política de automóviles eléctricos más exitosa del mundo".
En lo que va de año, en Noruega se han vendido 55.000 coches eléctricos, lo que porcentualmente supone una cifra excepcional en comparación con el resto de mercados del mundo. En lo que respecto al último mes computado, nunca se han vendido menos coches nuevos de gasolina y diésel como en el pasado mes de julio. Su participación en el mercado es de un 10 % en lo que va de 2021, un 8,38 % en julio.
Las críticas de la NAF a los políticos noruegos
A pesar de que casi dos de cada tres coches nuevos que se venden en Noruega son completamente eléctricos, la NAF es muy crítica con la política del gobierno. Cree que l no cumple con los objetivos, "es incómoda, semilaxa e irrespetuosa con los consumidores", afirma Thor Egil Braadland, responsable de las relaciones entre la Asociación automovilística noruega NAF y el gobierno.
Thor Egil Braadland, responsable de las relaciones entre la NAF y el gobierno. La Asociación automovilística noruega (Norges Automobil Forbund-NAF) critica la política del gobierno noruego respecto a los coches eléctricos por incómoda e irrespetuosa.
Según la NAF faltan instrumentos satisfactorios en tres áreas clave para lograr el objetivo de que en 2025 todos los automóviles nuevos que se vendan sean completamente eléctricos. La primera es la incertidumbre sobre qué tipo de impuestos tendrá el automóvil eléctrico a partir de 2022. La segunda una infraestructura de carga insuficiente y la tercera su falta de usabilidad.
Muchos propietarios han mostrado su disgusto ante las largas colas para recargar sus coches y las innumerables aplicaciones que han de manejar para gestionarlas. Además, la NAF afirma que la facilidad para su uso es también un factor clave. Precisamente el éxito del coche eléctrico en Noruega lo convierte en una herramienta que debe funcionar sin necesidad de tener que familiarizarse con excesivos detalles técnicos.
Según la NAF, esta situación está provocando que aproximadamente un tercio de los compradores se pregunten si su próximo coche será eléctrico. La Asociación cifraba en 500 los cargadores rápidos que faltaban en Noruega en 2020, y la tendencia no ha disminuido a pesar de que se han incrementado las ventas hasta alcanzar actualmente los 250 coches eléctricos que se venden allí cada día.
Sin embargo, el mayor obstáculo para cumplir el objetivo de 2025 puede que no se la recarga, sino la incertidumbre sobre lo que realmente costará un coche eléctrico. En poco más de dos meses, el gobierno presentará su propuesta de presupuestos para 2022, en el que puede incorporarse un cambio fiscal en lo que respecta al IVA, del que actualmente están exentos. Sin embargo hasta diciembre no se cerrará el debate.
En 2022 se venderá aproximadamente 120.000 coches eléctricos en Noruega, cuyos pedidos se anticiparán en 2021, por lo que el debate del IVA ya va retrasado respecto a los intereses de los compradores. Todos los partidos del espectro político noruego defienden la medida en mayor o menor grado. Desde los que piden eliminarlo para todos los coches, hasta los que piden empezar por los más caros. En el medio están los que quieren hacerlo gradualmente en paralelo con la eliminación de los beneficios en peajes y estacionamientos gratuitos.
La respuesta del gobierno noruego
Nada más conocer las críticas de la NAF a las políticas relacionadas con los coches eléctricos, el gobierno noruego ha querido salir al paso con las declaraciones del ministro de Clima y Medio Ambiente, Sveinung Rotevatn, que recordó que Noruega "tiene la política de coches eléctricos más exitosa del mundo".
Sveinung Rotevatn, ministro de Clima y Medio Ambiente. El gobierno recuerda que Noruega tiene la política de coches eléctricos más exitosa del mundo y que es el rápido desarrollo el que está creando desajustes que acabarán desapareciendo.
Según Rotevatn, "no hay un lugar en el mundo donde prefieras ser propietario de un automóvil eléctrico que aquí mismo". Según el ministro, que pertenece al Partido Liberal, el desarrollo del mercado del vehículo eléctrico va según lo programado, aunque admite que hay zonas en los que la infraestructura de recarga necesita un refuerzo. Para evitar estas situaciones, están en marcha programas de apoyo que poco a poco cambiarán esa realidad.
En cuanto a las largas esperas, Rotevatn afirma que es señal de que existe demanda y es una confirmación de que la política está funcionando. Hay que tener en cuenta que el desarrollo ha sido tan rápido que la infraestructura de recarga va por detrás, pero eso no quiere decir que no vaya a llegar.
Respecto a la dificultad para usar los puntos de recarga, el ministro asegura haber recibido varios mensajes respecto a este problema y asegura que no sabe exactamente "por qué esto es así". Además, añade que "si muchos están descontento, debemos tomárnoslo en serio". Los consumidores deben acceder de manera sencilla al servicio, conocer los precios y poder tomar decisiones. Y eso solo se consigue en un mercado en el que se haya establecido una buena competencia, es decir, es algo que el propio mercado se encarga de regular.