VanMoof, la compañía neerlandesa de bicicletas eléctricas, ha vivido un 2023 del todo caótico. El pasado verano se confirmaron los peores rumores: la marca entraba oficialmente en bancarrota. Los motivos que impulsaron esta caída fueron varios, aunque el mayor culpable fue la gran lista de espera de reparaciones debido a numerosos fallos en su sistema eléctrico. Pero solo unas semanas más tarde, VanMoof fue adquirida por Lavoie, la filial eléctrica de McLaren, que la devolverá a la vida.
En Lavoie han estado muy ocupados realizando las reparaciones que VanMoof llevaba meses acumulando. Una vez este primer paso para la recuperación de la marca haya sido subsanado, esperan recomenzar con las ventas de bicicletas eléctricas “muy pronto”.
El regreso a la vida de VanMoof
Desde Lavoie afirman que el primer lote de bicicletas eléctricas de VanMoof en esta nueva etapa se lanzará “muy pronto”, aunque no sin antes haber hecho ciertas modificaciones y reestructuraciones en diferentes apartados de la compañía holandesa. Dicha reestructuración se llevará a cabo entre los diferentes directivos y responsables internos. Con ello, esperan seguir contando con un producto atractivo, sostenible y con un servicio a la altura de lo esperado.
Por otro lado, Lavoie ha confirmado que presentará sus propios diseños y renovados modos de fabricación. Sobre esto último, harán especial hincapié en la calidad sobre la cantidad. Además, renovarán puntos de venta y talleres de reparación autorizados. Todo ello con el fin de transformar a VanMoof en una marca más fiable y con el mejor servicio del sector de las bicis eléctricas.
Sobre esto, concretamente, según un artículo publicado por E-Bike, Lavoie espera cambiar significativamente los servicios al cliente de VanMoof. En primer lugar, se centrarán en obtener una mayor disponibilidad de piezas de repuesto para, posteriormente, incrementar la asociación con proveedores de servicios externos y poder atender así a un número más amplio de clientes en todos los apartados.
Sin embargo, no todo son buenas noticias, ya que el informe asegura que alguna de las reclamaciones interpuestas a la compañía con anterioridad a su declaración de bancarrota podrían no ser resueltas, aunque estudiarán cada caso de manera pormenorizada. Entre dichas reclamaciones, además de las reparaciones, también se encuentran retrasos en la entrega de bicicletas compradas o incluso clientes que han pagado por bicicletas eléctricas que no han recibido.
Sea como fuere, VanMoof volverá a la vida en las próximas semanas, primero afrontando todas la reparaciones pendientes y, posteriormente, reiniciando sus ventas. Más adelante, ya bien entrado 2024, se espera que puedan lanzar nuevos modelos de bicicletas eléctricas que se quedaron en el tintero, como la anunciada (e ilegal en muchos mercados por tratarse de una s-Pedelec con dos motores) VanMoof V.