Por todos es sabido que Android Auto permite integrar aplicaciones de navegación y otras de tipo multimedia en el sistema de info-entretenimiento. Lo que no se podía esperar es que abriera la mano también a otras como Zoom, Webex o incluso Microsoft Teams. Pero lo cierto es que las dos primeras funcionan con esta tecnología aplicada al automóvil desde el último trimestre del año pasado y con Teams va a ocurrir lo mismo a partir del mes de febrero de 2024. Así lo han confirmado desde Microsoft.
Y tampoco es ninguna novedad para Apple CarPlay, pues el sistema rival de Android cuenta con la posibilidad de hacerlo desde finales del año 2020 para las tres soluciones mencionadas anteriormente, que son las que más se utilizan en nuestro país.
Las posibilidades van desde que la aplicación avise desde la pantalla multimedia del coche de una reunión inminente a consultar el calendario de la jornada, pasando por la la aceptación o entrada a las videollamadas, que en Android Auto y Apple CarPlay se reducirán a llamadas de audio, ya que el formato vídeo porque puede despistar al conductor. Al menos de momento, y mientras en España y el resto de países de todo el planeta no funcionen los coches autónomos en su máximo nivel y con todas las seguridades exigidas.
Recordemos que en España no está homologado nada más allá de un nivel 2 de conducción sin conductor, mientras que en otros países los de nivel 5, el más alto posible, están en fase de pruebas y no sin problemas. California permitía hace unos meses los robotaxis autónomos de Cruise, pero les prohibió seguir operando tras varios incidentes, con atropello incluido a una mujer que, por suerte, sobrevivió para contarlo.
Reino Unido, por su parte, acepta la llegada paulatina de estos vehículos dentro de dos o tres años, pero ha avisado a los fabricantes de que los hará responsables de los accidentes que ocurran cuando el sistema de conducción autónoma esté activado.
Pero, mientras la llegada del coche autónomo se retrasa, Android y Apple ya aseguran que ningún empleado se perderá una llamada del trabajo, aunque todo se quede en poco más que escuchar al resto de compañeros y participar puntualmente. Y decimos "puntualmente" porque, aunque los sistemas manos libres están permitidos en el vehículo, lo cierto es que entretienen en cierto modo y pueden dar lugar a que el conductor pierda la concentración. Correr riesgos extra en el coche no es una opción.
Así que debe entenderse que sólo es viable para intervenciones concretas de apenas unos minutos y siempre que la mirada no abandone la carretera mucho más de lo que lo haría para cambiar de emisora de radio, activar el climatizador del vehículo o cualquiera de las funciones integradas y de rápido acceso.
¿Crees que debería prohibirse el uso de estas aplicaciones en el coche?