El mercado chino del automóvil, líder mundial en la producción y venta de vehículos eléctricos, representa un entorno extremadamente competitivo para cualquier fabricante. Es habitual que marcas globales lo vean como una oportunidad para maximizar rentabilidad, especialmente al establecer allí tanto la producción como las ventas. Un ejemplo reciente es Cupra, que ha elegido China como base de fabricación para el Tavascan, su esperado SUV eléctrico.
Sin embargo, resulta sorprendente que Aiways, una de las primeras marcas chinas en establecerse oficialmente en Europa, haya decidido abandonar su mercado de origen. La empresa, que nació aprovechando el impulso hacia la electrificación, se ha visto superada por la intensa guerra de precios y la competencia feroz en China, donde solo unas pocas compañías dominan las ventas.
Nueva estrategia para Europa
La decisión de Aiways de retirar operaciones en China refleja una realidad dura: las ventas no han sido suficientes para justificar una mayor inversión en su país natal. Según la propia marca, el mercado chino está saturado, y el crecimiento que queda por alcanzar en el sector de vehículos eléctricos parece reservado para unos pocos gigantes consolidados.
En contraste, Europa ofrece un escenario más favorable para fabricantes emergentes. Aunque el coche eléctrico ya está ganando popularidad, aún no existe la misma intensidad competitiva que en el segmento de motores térmicos. Esto ha permitido a empresas como Aiways intentar establecerse en el continente. Hasta ahora, solo Tesla ha conseguido consolidarse como líder de ventas de eléctricos en Europa, mientras que otros fabricantes aún buscan posicionarse con modelos exitosos.
Actualmente, Aiways comercializa en España dos SUV eléctricos: el U5 y el U6, con precios iniciales de 46.640 y 49.540 euros, respectivamente. Ambos modelos ofrecen una autonomía homologada cercana a los 400 kilómetros. No obstante, enfrentan una dura competencia en su segmento, con rivales como el Renault Scenic E-Tech, el BYD Seal U y el Tesla Model Y, este último considerado un referente en prestaciones y precio.
Un futuro incierto: Europa como tabla de salvación
Con la decisión de abandonar China, Aiways ha trasladado el foco de sus operaciones globales a Europa, específicamente a Alemania. Según una fuente interna citada hace unos meses por Autocar, este movimiento responde tanto a la necesidad de reforzar su presencia en el mercado europeo como a preparar su salida a Bolsa, prevista para 2024. Sin embargo, la salida de su mercado de origen podría dificultar atraer inversores, dado que plantea dudas sobre la viabilidad a largo plazo de la marca.
Además, Aiways se enfrenta a otros desafíos. La marca tenía en sus planes expandirse al mercado norteamericano a finales de esta década, pero las crecientes restricciones en Estados Unidos sobre la importación de vehículos chinos complican esta estrategia.
Lo que Aiways necesita para sobrevivir
Para evitar la quiebra, Aiways debe apostar por una estrategia innovadora que incluya nuevos modelos atractivos o políticas de precios más agresivas. Sin una oferta diferenciada y competitiva, será difícil ganar cuota de mercado en un entorno cada vez más exigente.
Por el momento, Europa parece ser su principal esperanza. Aunque el mercado todavía no está tan saturado como en China, la competencia se intensifica rápidamente, y solo el tiempo dirá si Aiways logra posicionarse como un jugador relevante en la transición hacia la movilidad eléctrica. Su retirada de China y el traslado de operaciones a Europa muestran un intento de adaptarse y sobrevivir en un mercado dinámico. Sin embargo, el éxito dependerá de su capacidad para innovar y responder a las demandas de los consumidores en un sector en constante evolución.