El nicho de mercado que conforman los SUV de estilo coupé aporta a los fabricantes un muy buen margen de beneficio. BMW empezó esta moda con el X6 para más tarde replicarlo con el X4, siendo imitada después por todos y cada uno de los fabricantes europeos. Renault también probó suerte con el Arkana, y viendo cómo de exitoso ha sido el modelo, ahora ha probado suerte con un nuevo SUV de línea coupé situado un par de segmentos por encima de este modelo.
Hablamos del Renault Rafale. Un SUV que por sus medidas se sitúa de lleno dentro del segmento D, aunque a decir verdad, dado su diseño de estilo coupé no llega a rivalizar de manera directa con la oferta tradicional de esta categoría, ya que ninguna firma generalista ofrece un SUV de este tipo. El Peugeot 408, tal vez, podría ser su única alternativa, aunque este divaga entre las formas de un crossover y una berlina, mientras que el Rafale es, claramente, un SUV.
Mide 4,71 metros de largo, su carrocería se levanta 18 centímetros del suelo y su maletero tiene un volumen de 528 litros, por lo que tiene un tamaño que será capaz de lidiar de sobra con las exigencias de una familia de cuatro miembros.
El Renault Rafale se comercializa ya en España con un precio que arranca, antes de descuentos, en los 41.807 euros. Sin duda, no se trata de un precio bajo en términos generales, pero se trata de un D-SUV de líneas coupé que es exactamente 18.793 euros más barato que el BMW X4, el precursor de su propia categoría.
Además, la mecánica E-Tech del Rafale, heredada del Austral, promete, como pudimos comprobar nosotros mismos, consumos realmente bajos a pesar de entregar sus 199 CV con contundencia cuando se le pide.
Su esquema de propulsión tiene como principal protagonista un motor de tres cilindros, turboalimentado, de 1,5 litros de capacidad. Este se coordina con dos motores eléctrico de 34 y 68 CV de potencia, que se surten de energía de una batería de 2 kWh. Estando ante un híbrido convencional (HEV), se trata de una batería de capacidad relativamente alta. Es, precisamente, gracias a esto último por lo que puede homologar un consumo medio de 4,7 litros. El 0 a 100 kilómetros por hora, por su parte, lo logra en 8,9 segundos.
La versión de acceso a la gama es, a nuestro juicio, la más recomensable. Se denomina Techo. Por encima queda la Sprit Alpine, de acento deportivo, que es signficativamente más cara (parte de 46.172 euros). La línea más sencilla ya propone una dotación de equipamiento de serie en la que no se echa en falta completamente nada.
Para terminar de redondear la faceta exclusiva del modelo se pueden añadir, de manera opcional, el techo de cristal panorámico (1.500 euros), volante y asientos delanteros calefactados (500 euros), un paquete que incluye el sistema de sonido firmado por Harman-Kardon (950 euros) o el sistema 4 Control Advance (1.500 euros), con las ruedas traseras directrices, lo que brindará al modelo una sensación de maniobrabilidad superior.
Más adelante, tal y como ha confirmado la marca, debería llegar un Rafale propulsado por una mecánica híbrida enchufable que brinde más de 50 kilómetros de autonomía puramente eléctrica, pudiendo optar esta versión a las ayudas del Plan Moves III.