La nueva normativa de la Unión Europea está obligando a realizar un esfuerzo considerable a los fabricantes para cumplir con la cuota de emisiones asignada para su flota en función de sus ventas. De hecho algunos de ellos, al menos en este primer año de vigencia de la normativa, no lo van a conseguir por lo que les tocará pagar multas muy cuantiosas. Es el caso de Honda, que, viendo el panorama, ha recurrido a Tesla para comprarle sus 'no emisiones', unirse a su flota y cumplir el objetivo marcado.
Según un informe publicado por la ONG Transport & Environment basado en las ventas del primer semestre de 2020, el grupo PSA, Volvo, FCA y el Grupo BMW son los cuatro fabricantes que ya cumplen con la nueva normativa de emisiones de la Unión Europea que han entrado en vigor en 2020. El objetivo de emisiones promedio de CO2 para la flota conjunta de cada fabricante es de 95 gramos de CO2 por kilómetro en 2020. La Comisión Europea establece una sanción equivalente a 95 euros por cada gramo de CO2 que exceda el límite, multiplicado por cada uno de los coches que se vendan en 2020 y 2021, que es el periodo de transición de dos años acordado.
Para los fabricantes, la manera más sencilla de reducir las emisiones es incluir vehículos totalmente eléctricos (o al menos híbridos enchufables) en su flota. Sin embargo, hay una puerta trasera que es la que Honda va a utilizar. Aprovechará que la Unión Europea permite a los fabricantes unir las emisiones de sus flotas y contabilizarlas en conjunto para poder alcanzar los objetivos fijados, una estrategia similar a la compra de créditos de otros fabricantes que lleva tiempo implementado en California, por ejemplo.
En el informe de T&E destaca la presencia del Grupo Fiat Chrysler Automobile (FCA), ya que es una de las compañías más rezagadas en la electrificación de su flota. Aunque ya ha establecido un plan estratégico general para los próximos cinco años, con la inversión de 9.000 millones de euros en coches híbridos y eléctricos y la eliminación del diésel a partir de 2022 para este año no es suficiente. Por eso, FCA aprovechó esta segunda opción de la normativa para echar mano también de Tesla, con la que alcanzó un acuerdo para contabilizar conjuntamente las emisiones de sus respectivas flotas a cambio de 2.000 millones de dólares (unos 1.700 millones de euros).
Ahora, según informa Bloomberg, "Honda se une a FCA para poner en común su flota con la de Tesla y cumplir este año con los estrictos estándares de emisiones de Europa". En este caso, no se conoce la cuantía del contrato que une a Honda con Tesla para formar parte de este grupo.
Honda e, un coche eléctrico premium, urbano, muy dirigido a un mercado de nicho.
El Honda E, no es suficiente
Con el objetivo de comenzar a electrificar su flota, Honda presentó en Europa el Honda-e. Sin embargo, sus características lo convierten en un coche eléctrico premium, de carácter urbano, pequeño, con poca autonomía y dirigido a un nicho de compradores que buscan moverse por la ciudad de forma diferente. Un coche eléctrico interesante y diferenciador que no alcanzará altas cuotas de ventas, por lo que no evitará las temidas multas de la Unión Europea.
Por su parte, la venta de créditos de emisiones se está convirtiendo en una línea de negocio interesante para Tesla. El trimestre pasado, los ingresos por este concepto alcanzaron los 400 millones de dólares, aunque el fabricante californiano ya ha anunciado que, en el futuro, tiene intención de ser una empresa rentable sin tener que vender ningún crédito.
Tesla no es el único fabricante que se beneficia de las nuevas regulaciones en Europa. Volvo ha anunciado recientemente que también superará los requisitos de emisiones de la flota, por lo que ha firmado un acuerdo con Ford para agrupar las ventas en Europa, por una cantidad no revelada.