El mercado busca nuevas e interesantes soluciones de movilidad. La forma en la que nos desplazamos ha cambiado muy deprisa en muy poco tiempo. Hoy las ciudades están inundadas de patinetes, bicicletas, scooters y muchos otros formatos de movilidad que dan respuesta a un problema de espacio. Los coches deben adaptarse a nuestra forma de vida y en Kia ya ultiman los preparativos para lanzar al mercado una hornada de vehículos eléctricos, los PBV (Purpose Built Vehicle), o lo que es lo mismo, 'Vehículo Para un Propósito'.
Suena un poco marketiniano y en realidad lo es. Con estas siglas, Kia quiere decirnos que está desarrollando toda una gama de vehículos eléctricos modulares. Los planes son realmente ambiciosos. El objetivo de la compañía coreana es vender cuatro millones de coches al año en 2030, de los cuales la mitad serán electrificados y 1,2 millones serán exclusivamente eléctricos. En esos retos de ventas también se incluyen los PBV, vehículos adaptables a diferentes usos, desde el transporte de última milla a su empleo como sistema de carsharing.
Plataforma tipo monopatín y carrocerías adaptables a cada uso y necesidad
La idea principal es que cada cliente busque la solución que mejor se adapte a su negocio o necesidad. La presentación del vehículo cuenta con los elementos básicos que todos necesitamos y, a partir de ahí, ofrece un amplio abanico de soluciones. El cliente será quien determine los componentes finales. Los coreanos se centran principalmente en el sector del transporte de mercancías ligeras y en el campo del transporte de pasajeros, es decir, los taxis. En un futuro el objetivo es que esos taxis operen por sí mismos al incorporar las tecnologías más punteras en materia de conducción autónoma.
Pero antes que correr hay que gatear, y en Kia saben que su estrategia necesita tiempo. A pesar de ello, la compañía no ha reparado en gastos. Para liderar la industria de los vehículos PBV, levantarán una fábrica completamente nueva en Corea del Sur. El centro se construirá en las actuales instalaciones de la ciudad de Hwaseong. Con un presupuesto todavía no desvelado, tendrá una capacidad productiva inicial de 100.000 unidades, pudiendo llegar a las 150.000 si la demanda es más alta de lo inicialmente previsto. Los trabajos de ensamblaje comenzarán en 2025.
Antes de esa fecha, en enero del próximo año, en el entorno más tecnológico del mundo, el CES de Las Vegas, Kia presentará en sociedad nuevos prototipos que adelantarán la hoja de ruta del segmento PBV. Los coreanos acompañarán sus revelaciones con un detallado informe sobre lo que esperan obtener en esta nueva senda, dando de paso algunas pinceladas de la estrategia empresarial. El principal elemento sobre el que se apoyarán los modelos PBV será la plataforma. Una estructura tipo monopatín que permitirá adaptarse a diferentes tamaños, desempeños y usos. KIA ha denominado a esta súper plataforma con las siglas eS.