El Leapmotor T03 llegó a Europa a finales del pasado verano con una clara promesa: ofrecer uno de los coches eléctricos más asequibles del mercado actual. Y así fue. El pequeño vehículo parte en España desde sólo 18.940 euros, sin incluir ayudas o descuentos. De esta forma, su rival más directo es el Dacia Spring que parte desde 17.890 euros. No obstante, el modelo chino llega con un más alto nivel de equipamiento de base.
Desde Leapmotor llegaron con ganas de ‘comerse’ el territorio. De hecho, el interés del gran público por sus vehículos eléctricos está creciendo significativamente. Un punto favorable de ello es su forma de esquivar los poco deseables aranceles a la importación de coches eléctricos chinos. Y lo han hecho de la mano de Stellantis, ya que el gran conglomerado le ha cedido parte de sus instalaciones de Tychy, Polonia, para la producción de este modelo. Hasta ahora.

Los aranceles europeos podrían estar detrás de esta decisión
El pasado mes de septiembre, Leapmotor comenzó a producir en masa el T03 en la mencionada fábrica europea. Ahora, apenas unos meses más tarde, la marca ha cortado de raíz esta relación, por lo que, oficialmente, el T03 se ha quedado ahora en un limbo y en una situación que nadie estaba que llegase a suceder.
“Stellantis ha dejado de ensamblar el modelo T03 de Leapmotor en la planta de Tychy a partir del 30 de marzo”, según apuntan de forma oficial desde la compañía. De esta decisión se han hecho eco desde el medio Handelsblatt, donde escriben lo siguiente citando a una fuente interna: “Una instrucción no oficial del gobierno chino podría haber provocado la retirada del T03 de Polonia”.
Todo apunta a que esta decisión habría venido derivada de los conocidos aranceles de Europa hacia China. Hace unos meses, el gobierno oriental instó a sus compañías compatriotas a suspender sus inversiones sobre todos aquellos países que apoyaran abiertamente este impuesto europeo. Polonia, de hecho, fue uno de partidarios de su aplicación.

Por ello, todo apunta a este como un posible motivo. Sin embargo, no existe una respuesta clara y oficial para ello. De forma paralela, el Gobierno de España se dispuso hace unos meses a mediar para suavizar o eliminar estos aranceles, lo que podría haber provocado traer a España la producción del B10 y del C10, el cual podría ir a la planta de Zaragoza.
No obstante, tras este varapalo con la producción del Leapmotor T03, aún su próximo destino es incierto. Por el momento no se conocen novedades al respecto o dónde podría trasladar su fabricación. Stellantis tiene otras varias instalaciones, como la de Eisanach y Trnava, en Eslovaquia.
Queda claro que Stellantis seguirá siendo un actor prioritario en la vida de Leapmotor, ya que el gran grupo automotriz posee el 51% de la propiedad de esta firma china. Desde Leapmotor esperan seguir creciendo con más de 600 puntos de venta repartidos por Europa para finales de 2025.