Es precisamente el lema de esta empresa española, "el futuro es ecléctico", el que permite concebir esperanzas al INNengine e-Rex, un motor de combustión bautizado como de ‘un tiempo’, aunque, por definición, es un motor de dos tiempos. Varias son las aplicaciones prácticas que la compañía enumera para él, entre ellas la de servir como un motor extensor de rango para vehículos eléctricos.
A diferencia de la mayoría de motores de dos tiempos convencionales, el INNergy e-Rex no quema en la misma cámara de mezcla el combustible junto con el aceite que necesita para lubricarse o enfriarse. Estos procesos ocurren por separado, como lo harían en un motor de combustión de cuatro tiempos.
En un motor de gasolina convencional, la admisión, la compresión, la combustión y el escape son cuatro fases que tienen lugar por separado. En un motor de dos tiempos, solo hay compresión y combustión, mientras que la admisión y el escape se producen simultáneamente.
Respecto a los motores de cuatro tiempos, los de dos tiempos son generalmente más potentes en relación con su tamaño y también son termodinámicamente más eficientes. Pero, por otro lado, los diseños convencionales son, en la mayoría de las veces, sucios, por la mezcla de aceite, y mucho más ruidosos, llegando a ser muy molestos.
Lo mejor de los cuatro tiempos en un solo tiempo (o dos)
Con el INNengine e-Rex se conservan todas las ventajas técnicas de un motor de dos tiempos y se eliminan las desventajas, lo que lo convierte en una opción muy convincente. Su arquitectura permite situar el escape por uno o por ambos lados sin tener que realizar muchas modificaciones, lo que facilita que pueda impulsar fácilmente más de un eje.
La configuración del motor de INNengine se basa en cuatro pistones que se sitúan en lados opuestos. Es decir, un total de ocho pistones. Cada par de ellos (opuestos) comparten una cámara de combustión y tienen unas varillas fijas detrás de ellos. Estas presionan unas placas con un diseño de onda oscilante para que, a su vez, presionen y suelten los pistones en un movimiento suave y coordinado.
La admisión y el escape suceden exactamente igual a como lo harían en un motor de dos tiempos, con el puerto de escape justo delante del puerto de admisión para que, al salir los gases de combustión, creen un vacío en el momento en el que el pistón pasa por la fase de admisión, lo que permite que penetre el aire para el siguiente ciclo. Por otro lado, el combustible y el encendido de la chispa se alimentan como lo harían en cualquier otro motor de pistón.
Esta configuración de pistones opuestos permite un motor de pequeño tamaño en el que el funcionamiento sea muy suave, con muy poco ruido y vibración. Además, el control del espacio entre los pistones durante la compresión mediante el desplazamiento de una u otra placa de extremo permite establecer compresión variable mejorando aún más la eficiencia.
Pruebas de INNengine
La empresa española ha implementado un prototipo de trabajo de su motor e-Rex en un Mazda MX-5 Miata. El motor permite que este automóvil disponga de tracción total, ocupando aproximadamente la mitad del espacio que ocupaba el motor convencional de 1,8 litros, siendo, además, mucho más ligero. Según INNergy el e-Rex de 500 cc produce 126 CV, una potencia comparable a la del motor original, aunque no hay información sobre la salida de par.
El diseño final del e-Rex es compacto y ligero, lo que facilita su instalación.
El e-Rex en la movilidad eléctrica
Independientemente de que este motor pueda aplicarse para propulsar por sí mismo un vehículo, parece más lógico plantearse su empleo en la nueva industria del automóvil tendente a la electrificación. Por otro lado, según indica INNengine, el motor puede funcionar con varios tipos de combustibles (incluidos los sintéticos).
Teniendo en cuenta que un coche eléctrico con batería es, aproximadamente, un 30% más pesado que el mismo modelo (si existe) con motor de combustión de gasolina, este motor podría ser una opción muy útil para funcionar como un generador muy eficiente en una opción de vehículo híbrido (enchufable o no) o en uno eléctrico con extensión de rango.
El e-Rex abarataría el precio de los vehículos, ya que podría reducir la necesidad de montar baterías de mucha capacidad, grandes y pesadas, el componente más caro y más complejo de un coche eléctrico.
Dado que la mayoría de las personas conducen, de media, entre 48 y 64 km al día, la reducción de peso aumentaría la autonomía y permitiría que el motor de combustión solo se use cuando el vehículo realiza un viaje largo.
Además, haría que el automóvil fuera más seguro, ya que las pruebas de choque muestran que los vehículos más pesados dan como resultado más lesiones y más graves para los ocupantes de los vehículos.
En resumen, el INNengine e-Rex es una innovación tecnológica interesante que podría encontrar un lugar en la compleja y cambiante industria del automóvil actual. La empresa asegura que también está listo para su uso en otros sectores, como la generación de energía marina y las instalaciones eléctricas desconectadas de la red. Si bien todavía quedan algunas preguntas sin respuesta sobre sus capacidades, el e-Rex es uno de los diseños más interesantes de los que han surgido en los últimos tiempos como alternativa a los motores tradicionales aplicados a diferentes usos.
