Técnicamente, existen cuatro tipos de electrificación, organizados de menor a mayor: híbridos de 48 voltios (MHEV), híbridos completos (HEV), híbridos enchufables (PHEV) y eléctricos de autonomía extendida (EREV), estos últimos a menudo agrupados. Por último, las dos tecnologías que no necesitan motor de combustión son los eléctricos puros (BEV) y los de hidrógeno (FCEV) que reemplazan la batería con una pila de combustible.
De todos estos, los primeros, los llamados híbridos suaves o microhíbridos, que utilizan componentes y sistemas eléctricos de 48 voltios, no pueden mover el coche en modo eléctrico. Esta tecnología combina un motor de combustión interna con un motor eléctrico de ese voltaje para mejorar la eficiencia y reducir emisiones. Utiliza un generador de arranque por correa que funciona como motor de arranque y genera electricidad, recuperando energía durante la frenada para recargar una batería de 48 voltios.
Híbridos en toda la gama Peugeot
La tecnología Hybrid de Stellantis se ha expandido rápidamente en los principales modelos de la gama de Peugeot: 208, 308, 408, 3008 y 5008 la implementan bajo los nombres Hybrid 100 y Hybrid 136. Según la marca, esta alternativa asequible permite reducir hasta un 20% el consumo de combustible y las emisiones de CO2, ofreciendo transiciones suaves entre motores térmicos y eléctricos gracias a la caja de cambios e-DCT6, sin necesidad de ajustes o enchufes adicionales.
Un gran paso para lograr superconductores a alta temperatura y cambiar para siempre el transporte y la energía
Dependiendo del modelo, las motorizaciones Hybrid pueden proporcionar potencias de 100 CV o 136 CV. Además, cuentan con los beneficios de la etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico, permitiendo acceso a áreas restringidas en varias ciudades de España.
El sistema hybrid de Peugeot, basado en la transmisión
El sistema hybrid tiene el corazón en la caja de cambios eDCT de doble embrague de 6 velocidades y transmisión eléctrica, en la que se integra el motor eléctrico, que se acopla lateralmente al de combustión mediante piñones. Esta arquitectura garantiza transiciones más suaves entre marchas y tipos de propulsión, facilitando también el mantenimiento.
Es precisamente la ubicación del motor eléctrico determina la clasificación de los híbridos, que se dividen principalmente en híbridos en serie y en paralelo. En los híbridos paralelos, tanto el motor de combustión interna como el eléctrico pueden impulsar el vehículo al mismo tiempo a través de la caja de cambios. Esta característica permite utilizar la propulsión eléctrica en situaciones de bajo par, como al circular en ciudad o a velocidades moderadas, como en terrenos llanos.
Según la versión, el motor eléctrico genera 15 kW / 20 CV o 21 kW / 28 CV, alimentado por una batería de 48 V y 0,9 kWh de capacidad que también alimenta los sistemas de confort y seguridad del vehículo, permitiendo que el coche circule alrededor de un kilómetro en modo eléctrico, una funcionalidad similar a la que ofrecen los híbridos eléctricos Full Hybrid. Esta configuración representa un ahorro de costes, ya que no es necesario certificar el vehículo con componentes de alta tensión.
Según Peugeot, esta cifra puede aumentar hasta casi la mitad de los trayectos urbanos gracias al sistema de recuperación de energía durante frenadas y desaceleraciones. A mayores velocidades, el motor eléctrico asiste al motor de gasolina según la situación. El generador de arranque por correa (BSG) asegura una transición rápida y suave entre los modos de conducción híbrido y cero emisiones.
Además de sus beneficios medioambientales, la tecnología híbrida de 48 V de Stellantis añade el efecto boost: el motor eléctrico de 21 kW mejora la aceleración, especialmente a bajas revoluciones apoyando al motor de gasolina.
