El patinete eléctrico se ha convertido en uno de los medios de transporte más usados en la ciudad. Sin embargo, han bastado unos pocos años para que le haya salido un gran detractor, el transporte público. Los conocidos como Vehículos de Movilidad Personal (VMP) tras se un éxito en ventas e idear planes de movilidad en las grandes ciudades adhoc para sus usuarios, están viéndose perjudicados por algunas ordenanzas municipales y demás legislación, tal y como está ocurriendo en Madrid y Barcelona. ¿Qué multa se impone si montas con estos vehículos en el transporte público?
La multa que te pueden imponer en Madrid y Barcelona por subir al transporte público en patinete eléctrico
La Comunidad Autónoma de Madrid y la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) de Barcelona, han prohibido el acceso a la red del transporte público de los denominados VMP. Es una medida que fue iniciada en Madrid el pasado 4 de noviembre, habiéndose copiado la medida en Cataluña. Se trata de una polémica medida que deriva del potencial riesgo de incendio o explosión que puede producirse en las baterías del patinete eléctrico y resto de alternativas similares.
📷 #IMÁGENES Sólo daños materiales y sin heridos. El último vagón de la línea 2 de @metro_madrid quedó destrozado tras explotar la batería de un patinete eléctrico. Estas son las imágenes 👉 https://t.co/KtdGNf9SbI pic.twitter.com/4tCDDIzBcx
— Telemadrid (@telemadrid) October 18, 2023
En Barcelona, esta restricción de paso incluye a los trenes de Rodalies, los Regionales y el propio metro de Barcelona, así como el uso de autobuses urbanos e interurbanos y el tranvía de Barcelona. De esta manera, se busca limitar cualquier foco de riesgo derivado de estos medios de transporte personales. La cuantía de la multa será de 200 euros, aunque habrá un previo apercibimiento consistente en una invitación para que baje del medio de transporte público.
En el caso de la Comunidad de Madrid, la comisión de la infracción se penaliza con multa que discurre entre los 100 y los 200 euros, de acuerdo con el Consorcio de Transportes de Madrid.
¿Has visto alguna vez una batería de un smartphone arder? El conjunto de baterías de un patinete eléctrico multiplica dicho efecto, hecho que es conocido como fuga térmica o embalamiento térmico. Es un proceso químico en el que se retroalimenta el incremento de calor, pudiendo dar como resultado una explosión del conjunto o la aparición de un incendio muy difícil de apagar debido a la composición de las baterías. Varios episodios acaecidos en los últimos meses en el transporte público de Madrid y Barcelona han determinado la imposición de esta polémica medida.