La marca Volkswagen invertirá 11.000 millones de euros en electromovilidad, conducción autónoma, así como en nuevos servicios de movilidad y en la digitalización de sus vehículos entre 2019 y 2023.
En la sesión anual de marca que el fabricante alemán ha celebrado este jueves en Wolfsburg (Alemania), el director de Operaciones de la compañía, Jürgen Stackmann explicó que 9.000 millones irán destinados a la ofensiva de electrificación de la firma.
El grupo Volkswagen ya anunció a mediados de noviembre que invertirá un total de 44.000 millones de euros en electromovilidad, conducción autónoma, nuevos servicios de movilidad y en la digitalización de los vehículos y de las plantas, lo que representa cerca de un tercio de la inversión total que realizará la compañía para el período comprendido entre 2019 y 2023.
Stackmann subrayó que la marca Volkswagen mejorará "significativamente" el rendimiento de sus ganancias en los próximos años para financiar inversiones en tecnologías futuras con sus propios recursos. En total, el fabricante germano ofrecerá alrededor de 20 modelos eléctricos en 2025, con una producción prevista de un millón de unidades.
Plan de electrificación
La compañía ya está trabajando en la transformación de su planta de Zwickau (Alemania) para convertirla en una factoría de producción de vehículos eléctricos. Prevé fabricar hasta 330.000 coches eléctricos al año en este centro. Volkswagen está impulsando su ofensiva de vehículos eléctricos y para ello está adaptando la capacidad de fabricación necesaria para la producción de más de un millón de vehículos eléctricos al año para el horizonte 2025.
Asimismo, Volkswagen transformará sus plantas alemanas de Emden y Hannover en factorías de producción de automóviles eléctricos y establecerá su segundo centro de movilidad eléctrica en el estado federal de Baja Sajonia (Alemania). También avanzó que "pronto" tomará una decisión para ensamblar automóviles eléctricos en América del Norte.
Emden producirá vehículos eléctricos a partir de 2022, mientras que Hannover acogerá la familia I.D. Buzz también a partir de 2022, junto con vehículos de combustión interna. Además, dicho plan garantiza el empleo en ambas localizaciones hasta 2028, aunque Emden no podrá hacer fijos a los trabajadores temporales.
Por su parte, la primera fábrica del grupo Volkswagen diseñada específicamente para la plataforma modular eléctrica MEB está comenzando su construcción en Anting, Shanghai. Volkswagen expande su producción en China con tres nuevas plantas y ya alcanza 123 en todo el mundo.
Está previsto que la instalación comience a funcionar en 2020 con una capacidad anual prevista de 300.000 vehículos. Producirá varios modelos eléctricos nuevos de Saic Volkswagen, que incluyen SUV eléctricos puros de tamaño mediano y grande, así como sistemas de baterías. El primer vehículo en construcción será un MEB-SUV de la marca Volkswagen.
De su lado, de la nueva factoría de la 'joint venture' en Foshan (China) saldrán 600.000 vehículos al año y a partir de 2020 también acogerá vehículos electrificados sobre la plataforma MEB. En total, alrededor de 40 modelos diferentes de vehículos eléctricos se producirán en China para el año 2025 de la marca Volkswagen.
Volkswagen también invertirá "fuertemente" en digitalización. El Volkswagen Automotive Cloud, desarrollado junto con Microsoft, sienta las bases de la compañía para ofrecer una gama de servicios digitales cada vez más grande en vehículos totalmente conectados. El objetivo es crear el mayor ecosistema automotriz del mundo, destacó Stackmann.
Ahorro de costes
Para financiar las "enormes" inversiones futuras, la marca Volkswagen tendrá que realizar ahorros de costes aún mayores que los planeados anteriormente. "Hemos definido un conjunto de medidas para mejorar la rentabilidad de la compañía, que salvaguardarán la implementación total del pacto para el futuro al mismo tiempo que establecemos el rumbo correcto para 2025", explicó el responsable de Finanzas de la firma, Arno Antlitz.
Volkswangen planea unos ahorros de costes que ascienden a más de 2.200 millones de euros para finales de 2019, lo que significa que el fabricante germano casi ha logrado el ahorro total previsto de 3.000 millones para 2020.
Actualmente, aproximadamente el 60% de los modelos convencionales de la marca alemana se basa en la plataforma MQB y esto aumentará hasta un 80% para 2020. En total, Volkswagen ya ha fabricado más de 50 millones de vehículos basados la plataforma MQB, y el grupo está proyectando un volumen similar para los próximos años. Además, prevé que unos 15 millones de vehículos basados plataforma MEB deben salir de las líneas de ensamblaje bajo la primera oleada de modelos eléctricos a partir de 2019.
Por otro lado, Volkswagen pretende incrementar hasta un 30% la eficiencia de sus factorías para 2025 y reducirá de forma "masiva" la complejidad de su cartera de producto, que ofrece distintas versiones de cada modelo.
Estas y otras medidas, como la optimización de los costes de materiales, deberían contribuir a que la compañía aumente su retorno operativo sobre las ventas más rápido de lo que había previsto originalmente."Confiamos en que podremos alcanzar nuestro objetivo de un retorno operativo de al menos el 6% en 2022, tres años antes de lo planeado", señaló Antlitz.
