Si la pasada semana dábamos a conocer la que hasta el momento será la bicicleta eléctrica de montaña más asequible de la nueva gama de Decathlon, esta vez toca ver qué propone el modelo más puntero de la marca de la cadena francesa, Rockrider.
La han denominado Rockrider E-EXPL 720 S y se articula en torno a un esquema de doble suspensión y un motor eléctrico central para plantearse como la eBike más capaz de toda la marca. Ahora bien, con tal de seguir resultando asequible con respecto a la competencia, no recurre a una cuadro de fibra de carbono como sí sucede en la gama alta del resto de marcas. En este caso, sigue siendo de aluminio.
Según la tienda, "esta MTB eléctrica (E-MTB) está diseñada para travesías todoterreno por caminos abruptos, con gran desnivel (media montaña y montaña)" y, por esto mismo, su transmisión, suspensión y frenos están "seleccionados para ofrecer la máxima durabilidad y facilidad de mantenimiento". Además, tiene un sistema de conectividad que ofrece ciertas funciones al usuario a través de la aplicación móvil.
Situada por encima de las 520 y 520 S, la nueva 720 S marca distancias con respecto a sus hermanas de gama por ofrecer más batería, un motor más solvente y una parte ciclo mucho más capaz, especialmente su suspensión y frenos.
El encargado de la suspensión es RockShox, quien dota a la 720 S de un amortiguador central modelo Deluxe Select Coil y una horquilla delantera 35 Silver R de 140 milímetros de recorrido. Los frenos son unos Tektro M530 con discos de 203 milímetros de diámetro y pinzas de cuatro pistones.
Los componentes de sus sistema eléctrico también muestran un fuerte salto cualitativo con respecto a los modelos más asequibles de la serie E-EXPL. Empezando por su batería, la capacidad que anuncia es de 630 Wh, lo que con una carga completa se traduce a una autonomía de 82 kilómetros, la máxima de toda la gama. Aun así existe la posibilidad de aumentar el rango de uso mediante un extensor de autonomía de 360 Wh de capacidad, que, para poner esta cifra en contexto, es lo mismo que anuncia la bicicleta eléctrica de acceso a la gama de Rockrider. Con esta solución, se suman otros 44 kilómetros más de autonomía.
El motor eléctrico que ayudará al ciclista a superar con más facilidad los obstáculos está fabricado por la alemana Brose y es un modelo T, caracterizado por ofrecer un par motor de hasta 70 Nm y una asistencia al usuario de hasta un 320% sobre su propia potencia de pedaleo, aunque el límite siempre estará en los 25 kilómetros por hora obligados por la normativa. De esa velocidad hacia arriba no se contará con asistencia eléctrica.
Todo lo anterior lo ofrece Decathlon en España por 3.519,99 euros, un precio para el 99 % de los compradores, que en su mayoría buscan una bicicleta eléctrica más asequible capaz de lidiar con caminos de montaña de manera efectiva, pero sin mayores alardes. Para este cometido, sin duda, la Rockrider E-EXPL resultará mucho más apropiada y cuesta 1.400 euros menos.