Está claro que el mundo de las bicicletas eléctricas es un diamante en bruto que muchos fabricantes, tanto de coches como de motocicletas, no quiere perderse: no es la primera vez que traemos alguna creación en la que, de una forma más o menos involucrada, ha tenido como protagonista alguna marca relacionada con el mundo del motor.
En esta ocasión, Alpine, fabricante francés de deportivos es el partner en esta edición especial de Lapierre, marca de bicicletas, también francesa, que posee una larga trayectoria en el mundo del ciclismo: 75 años cumplió en el 2021.
La marca de coches Alpine se asocia con Lapierre
La colaboración de Lapierre con Alpine no es nueva: ya en el 2022 realizó una bicicleta de carretera, la Aircode DRS SE Alpine, que mostraba un exclusivo diseño con los colores de los coches Alpine y que incorporaba lo mejor de su categoría en cuanto a componentes.
Ahora, de cara al nuevo año, presenta otra versión de la Aircode, la DRS SE Le Mans y la que a nosotros nos interesa, la Overbolt GLP III SE Alpine, una bicicleta eléctrica de montaña que tiene el honor de haber sido la campeona del mundo de eMTB en este 2023 a manos del francés Jerome Gilloux.
Así es la Lapierre Overbolt GLP III SE Alpine Edition
La Lapierre Ovelbolt GLP se caracteriza por una peculiar disposición de su unidad motriz, un rasgo que se sigue manteniendo a día de hoy y que está reportando unos grandes resultados a nivel competitivo. Y es que, al contrario de lo que dictaminan las modas a día de hoy, la batería sigue apostando por estar semi-integrada, siendo visible desde el exterior. Además, el hecho de estar dispuesta casi encima del motor es otra de las peculiaridades de la Overbolt GLP III. Con ello, lo que se ha pretendido es conseguir un centro de gravedad tan bueno que el peso de más que siempre tiene una bicicleta eléctrica afecte poco al comportamiento de la misma.
Eso obliga a que la propia arquitectura del cuadro sea tremendamente original: el motor realmente va colgado del bastidor (y no dentro de él como es lo normal), lo que imprime una estética muy original. Por su parte, el triángulo trasero es, posiblemente, lo más convencional de esta eBike. Está realizado en fibra de carbono al igual que el resto de cuadro.
Su orientación es para la práctica del Enduro, para lo que se han incorporado suspensiones de largos recorridos (170 mm en cada rueda), con componentes de mucha calidad como son los proporcionados por Fox en el acabado Factory, el más exclusivo. Por otro lado, presenta una combinación de ruedas ‘mullet’ (delantera de 29’’ y trasera de 27,5’’) que permite acortar un poco la distancia entre ejes para no hacer de la Overbolt GLP III SE una bicicleta larga y lenta de reacciones.
Un detalle que casa a la perfección con el espíritu racing de Alpine es el motor elegido: el Bosch Performance Line CX Race es lo más rabioso que posee la firma alemana, un motor con 85 Nm de par motor y un aporte a la pedalada de hasta el 400%. Posee un modo de funcionamiento Race con una continuada entrega de potencia (Extended Boost) para salvar todo tipo de obstáculos que se pongan por delante. La batería para alimentar a este motor ofrece mucha capacidad: son 725 Wh y es suministrada por la propia Bosch. Para la transmisión también se ha contado con elementos muy elitistas, como es la X0 AXS de Sram, de accionamiento electrónico wireless.
Por último mencionar la decoración, que incorpora el color corporativo de Alpine (ese intenso azul que vemos en el exclusivo Alpine 110R) y varias inscripciones a lo largo del cuadro recordando su condición de edición exclusiva. Está a la venta por 11.499 €.