No es ningún secreto que a Volkswagen no le ha ido muy bien con su nueva etapa eléctrica. El caos y las pérdidas generadas por la división de coches eléctricos ha puesto contra las cuerdas al mayor fabricante europeo. Poco a poco los alemanes están dando los pasos necesarios para corregir la situación, pero todas las esperanzas están puestas en un coche que tendrá la llave del éxito o del fracaso, el Volkswagen ID.2. Estamos a escasos meses de su lanzamiento internacional, pero el jefe de ventas de Volkswagen, Martin Sander, ya ha dejado claro que supondrá un antes y un después no sólo para Volkswagen, también para el mercado en general.
El sueño del ID.2 lleva mucho tiempo sobrevolando sobre la cabeza de Volkswagen. Las premisas siempre han sido las mismas, ofrecer un coche eléctrico de gran volumen y aceptación capaz de satisfacer las necesidades clásicas del segmento de los utilitarios. El ID.2 será el sustituto natural del Volkswagen Polo. El Polo cumple este año su 50 aniversario. El mismo año en el que se presentará el ID.2. Es por esto, junto con declaraciones anteriores de varios altos representantes de Volkswagen, lo que ha permitido especular con que el ID.2 finalmente acabe llamándose Polo. Volkswagen quiere cambiarle el nombre a sus coches eléctricos.
El ID.2 será el coche más importante de Volkswagen en esta década
Se llame como se llame, el ID.2 jugará un papel fundamental en el devenir de Volkswagen. Si no triunfa podrá contra las cuerdas a los alemanes y a su más que ajustado plan económico. Las cartas están encima de la mesa y es hora de jugar. Los próximos meses se antojan críticos. El diseño del ID.2 ya está definido. Se alejará del habitual estilo de la familia ID para caer en brazos de un aspecto más tradicional y conservador. El Volkswagen ID2All debe servirnos de ejemplo para lo que podemos esperar. Un diseño que recuerda mucho al del Golf. Volkswagen quiere volver a sus orígenes, hacer lo que mejor sabe hacer.
Coches con una gran relación calidad-precio. Para ello, Sander tendrá que definir una hoja de ruta comercial. El ex director de Ford Europa entró a formar parte de la compañía el pasado mes de julio. A sus 57 años, tras una larga carrera, Sander se muestra optimista para este 2025 y predice que Volkswagen aumentará las ventas eléctricas y su cuota de mercado. Durante una entrevista a Automotive News Europe, ha declarado que el ID.2 supondrá un “cambio de paradigma”. Una revolución para el mercado europeo en un año que se antoja clave para la supervivencia del plan 2035. Sin embargo, el ID.2 apenas jugará un papel crítico durante este curso.
La presentación tendrá lugar en el último tramo del año, por lo que sus ventas no darán comienzo hasta principios del 2026. Además de contar un atractivo diseño y de una calidad acorde a lo que se espera de un Volkswagen, el reemplazo del Polo tendrá que cumplir con la promesa de ser barato. Sus rivales dentro de la categoría se ofrecen por un precio mínimo de 25.000 euros, aproximadamente. Los alemanes tendrán que mantenerse en esa cota si quieren tener éxito. Se esperan diferentes versiones, incluyendo un GTI que pondrá el extra de picante que siempre le ha caracterizado, aunque tardará mucho más en llegar a los concesionarios.