El 1 de marzo estaba grabado a fuego en el calendario de todos los amantes y seguidores de Tesla. Tras varios eventos en los que la ausencia de grandes novedades ha sido la tónica general, todo el mundo esperaba que el Investor Day de 2023 se transformase en un epicentro de información. Si bien se han realizado algunos anuncios importantes, muchos espectadores se han quedado con ganas de más. Veamos cuáles son las principales novedades.
Elon Musk ha dado las primeras pinceladas sobre la próxima generación de coches eléctricos. Habrá cambios muy importantes. Hace más de 100 años, el gran acierto de Henry Ford no fue la de crear el Model A, sino la cadena de montaje. La producción en masa reduce los costes y, gracias a ella, fue posible popularizar el coche. A lo largo del último siglo, las cadenas de montaje de automoción han evolucionado en torno al concepto original del empresario americano. La optimización de procesos y la robotización han obrado milagros en cuanto a volumen, pero Tesla cree que puede acelerar aún más las cosas con un ensamblaje paralelo.
Actualmente, el proceso de montaje exige que uno o varios operarios trabajen en torno al coche en estaciones cronometradas con acciones ensayadas. El espacio reducido limita el número de trabajadores y, cuanto más complejo es un coche, más larga es la cadena ya que se exigen más estaciones de trabajo. La propuesta de Tesla es dejar de lado la estructura del coche y trabajar por componentes que recorren paralelamente la línea principal. De esta forma se aumenta el volumen de empleados por estación y se aprovecha mejor el tiempo y los recursos. Obviamente, este formato requerirá de una gran modificación en las fábricas que actualmente basan su estructura en el formato de Henry Ford.
A fully sustainable future requires scale.
— Tesla (@Tesla) March 1, 2023
With our next-gen vehicle, manufacturing becomes significantly simpler & more affordable.
Our new unboxed manufacturing process will allow more work simultaneously on the vehicle—meaning we can build more vehicles at lower cost &… https://t.co/KxjtMrf3r0 pic.twitter.com/9YYt8wDFme
La tercera parte del Plan Maestro de Musk consiste en escalar la movilidad sostenible en todos los ámbitos, a la vez que se reduce la dependencia de materias primas escasas y no renovables. La extracción de materiales es un proceso unidireccional. El elemento se sustrae de la tierra, se refina, se emplea y ya está, no hay un retorno posible. La nueva promesa de Tesla con respecto a su próxima generación de coches eléctricos es olvidarse de elementos que necesiten tierras raras en su composición. Estos componentes están principalmente asociados con los motores síncronos de imanes permantes que Tesla utiliza actualmente.
En sus orígenes, el fabricante empleaba motores asíoncronos que posteriormente cambió por los síncronos de imanes permanentes. El objetivo de los ingenieros es prescindir de estos imanes, que elevan el coste de producción y complican la cadena de suministro por su complejo sistema de procesamiento. El proyecto puede parecer sencillo, pero en absoluto lo es. Actualmente, los motores eléctricos, así como otros componentes como discos duros o altavoces, emplean Disprosio o Terbio como aditivos en los imanes permanentes de Neodimio. Considerados como estándar dentro de la industria, los investigadores llevan años trabajando en sustitutos posibles que logren el mismo grado de eficiencia, pero sin la dependencia de esos componentes extraños y limitados.
Si sumamos los dos factores principales que Elon Musk ha anunciado durante esta madrugada, Tesla prevé un ahorro de costes de 1.000 dólares por unidad. No parece una cifra muy escandalosa, pero si tenemos en cuenta la escala en la que pretenden trabajar los de Austin, el impacto en el medio ambiente puede ser muy grande. Por supuesto, no hay plazos ni fechas para la llegada de esta nueva generación de eléctricos. Ni siquiera se ha hecho mención alguna al esperado compacto de precio razonable. Seguiremos a la espera.