El mercado de los SUV está repleto de opciones; diferentes tamaños, motores, estéticas, etcétera. Sin embargo, existe uno muy especial con una trayectoria nada convencional. Inicialmente comenzó como un SUV 100% eléctrico y, meses más tarde ,se adaptó para se "híbridos enchufable", según lo denomina la marca. En realidad, se trata de uno de los pocos coches eléctricos de autonomía extendida del mercado, es decir, el motor de combustión que acompaña al electrico, en realidad, no puede mover las ruedas. Hablamos del Mazda MX-30.
En materia estética no podemos entrar demasiado en profundidad, dado que esto siempre dependerá del gusto personal de cada uno. No obstante, queda claro que Mazda ha sabido adaptar acertadamente sus pautas de diseño a este SUV electrificado, posicionándose muy parejo al Mazda CX-30 en ciertos aspectos, lo que lo hace ser todo un acierto en reglas generales.
El Mazda MX-30 presenta unas cotas de 4.395 mm de longitud, 1.795 mm en su anchura y 1.555 mm en su altura. Esto lo posiciona directamente en el sector más disputado y donde más alternativas existen. No obstante, el modelo japonés puede enamorar por muchos motivos y superar a su competencia. Concretamente cuenta con elementos distintivos, por ejemplo, la apertura de sus puertas traseras, de tipo suicida, que evocan a un modelo mítico de la compañía, el Mazda RX-8, aunque tiene más cosas en común de las que hablaremos más adelante.
Si queremos diferenciar entre una de las dos mecánicas disponibles (híbrido enchufable y 100% eléctrico), únicamente se podrá hacer mediante los emblemas insertados alrededor de la carrocería, los cuales evocan al motor térmico con el que cuenta la versión electrificada.
Las ya mencionadas puertas dan acceso a un habitáculo con otros muchos puntos llamativos, como el uso del corcho para ciertas superficies de la consola central, por ejemplo. En el centro del salpicadero se sitúa una pantalla destinada a las funciones de información y entretenimiento, mientras que un poco más abajo, el clásico módulo de climatización aquí se ha sustituido por un nuevo panel táctil de 7 pulgadas.
En el resto de apartados cuenta con la mayoría de elementos ya conocidos en otros modelos de la firma japonesa, especialmente en la primera fila de asientos. La banqueta trasera, por su parte, dispone de varios elementos particulares. En primer lugar: su acceso. Como ya hemos mencionado, es a través de una pequeña puerta de tipo suicida, que deja un espacio bastante reducido para la entrada de pasajeros. De forma paralela, y como segundo punto, su espacio para las piernas no será excesivo, por lo que sus pasajeros irán algo más justos de habitabilidad. Por último, sus ventanillas no se pueden bajar, por lo que los únicos cristales practicables serán los de la primera fila.
Para cerrar el apartado del interior, el maletero del Mazda MX-30 cuenta con un volumen mínimo de 366 litros. Un total que no se diferencia en ninguna de las dos motorizaciones electrificadas con las que cuenta este coche. Alternativamente, su segunda fila de asientos se podrá abatir para lograr un máximo de 1.155 litros de capacidad.
Como ya hemos adelantado, el apartado mecánico de este coche es muy particular, especialmente para el Mazda MX-30 e-Skyactiv R-EV que es un eléctrico de autonomía extendida, aunque la marca lo denomina híbrido enchufable. Este se compone de un sistema eléctrico que desarrolla 127 kW (170 CV) de potencia y 260 Nm de par máximo conectado a las ruedas delanteras. Está alimentado por una batería de 17,8 kWh de capacidad que se puede conectar a la red o por la energía eléctrica generada por un motor de gasolina de tipo Wankell o rotativo de 75 CV. Por ello, esta variante ofrece una autonomía eléctrica de hasta 85 km que le otroga esa batería y que se puede alargar hasta los 600 km con los 50 litros de gasolina que admite el tanque de combustible. Esta variante cuenta con la pegatina CERO de la DGT.
Por otro lado, la alternativa 100% eléctrica es mucho más sencilla en cuanto a arquitectura, ya que se compone por un motor eléctrico instalado sobre el eje delantero que está alimentado por una batería de 35,5 kWh de capacidad y genera 108 kW (145 CV y 270 Nm de par máximo. Con ello, su autonomía homologada en ciclo WLTP se sitúa en torno a los 200 kilómetros.
El Mazda MX-30 está disponible en España por un precio inicial de 38.050 € para las dos variantes mecánicas. Este precio se podrá obtener mediante el acabado Prime-Line de acceso, el color Ceramic White, llantas de 18 pulgadas y tapicería interior de tela negra. Esta igualdad de precios se repite para el segundo acabado, Exclusive-Line. En los otros tres la variante de autonomí extendida es algo más cara.