Mullen Technologies firmó a finales del año pasado un acuerdo con el fabricante chino Qiantu para fabricar el K50, su deportivo eléctrico en Estados Unidos. Mullen ya ha decidido la ubicación en la que lo hará, situada en la ciudad de Spokane, en la parte oriental del estado de Washington. En anuncio es fruto del acuerdo al que ha llegado con la Autoridad de Desarrollo Público del Área del Aeropuerto de West Plains (PDA), propietaria del terreno y que también se encargará de la construcción de la instalación, que después alquilará a Mullen.
La planta tendrá una superficie total de 120.000 metros cuadrados y en ella Mullen ensamblará, fabricará y establecerá un equipo de I+D para el desarrollo de los vehículos. Según la empresa, inicialmente se crearán 55 nuevos empleos en Spokane pero, con el aumento de la producción, se alcanzarán hasta los 863 empleados en 2026. Mientras se pone en marcha, Mullen y PDA están buscando una instalación provisional para el desarrollo de la batería y la producción y ensamblaje inicial que, eventualmente, elevará el número de empleados hasta los 3.000.
Tras su presentación en Nueva York, "este primer paso es crítico para llevar el Qiantu K50 al mercado de Estados Unidos" según el fundador y CEO de Mullen, David Michery. "La respuesta que obtuvo el vehículo en el Salón fue increíble" ha afirmado. También durante la celebración del salón, un ejecutivo de Qiantu aseguró que el K50 saldría a la venta en la primera mitad de 2020, aunque, por las últimas informaciones es posible que se retrase a la segunda mitad.
El precio del vehículo arrancará en los 125.000 dólares, aunque con las diferentes opciones puede alcanzar hasta los 150.000. La previsión de la empresa es alcanzar unas ventas de 1.000 unidades en el primer año de producción y estabilizar después el volumen de ventas en las 2.500 unidades al año.
Qiantu K50
El Qiantu K50 es un deportivo eléctrico de dos plazas fabricado en fibra de carbono y aluminio. Sus dos motores eléctricos ofrecen una potencia conjunta de 320 kW (430 CV). El fabricante afirma que puede acelerar de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos y su velocidad punta, limitada electrónicamente, es de 200 km/. La batería proporciona hasta 320 kilómetros de autonomía gracias a unas baterías de litio que son el "30% más ligeras".
La fabricación se realizará íntegramente en Estados Unidos, si bien parte de los componentes serán importados de China directamente para ser ensamblados, mientras que otros serán de origen estadounidense. Esta estrategia debe suponer un importante ahorro en aranceles de importación que deberían trasladarse al precio final del vehículo.