La Honda X-ADV ha sido un modelo tremendamente exitoso debido a su fusión de la practicidad propia de un scooter con las prestaciones de una motocicleta de asfalto tipo trail. Esta fórmula ha inspirado a muchas otras marcas, incluyendo a fabricantes de renombre, a emularla de manera bastante evidente. Esto ha dado como resultado la creación de un nuevo segmento en la industria de las motocicletas, con modelos disponibles en una amplia variedad de cilindradas.
Es raro, sin embargo, que sean pocas las marcas que han lanzado modelos de 125, ya que es el segmento que más matriculaciones acumula en Europa año tras año. Aprilia sí lo ha hecho con la SR y Motorhispania también con un modelo similar, pero ninguna otra firma, ni siquiera la propia Honda, tiene una ADV de 125 de estética realmente conseguida.
Esto ha dado lugar a que los chinos se pongan manos a la obra con una moto eléctrica que podría pasar por una auténtica X-ADV 125 de Honda. En España, se comercializa bajo el nombre de NEM e-ADV y tiene un precio de 6.500 €, aproximadamente.
Dejando a un lado el hecho de que imita de manera descarada a la X-ADV de mayor cilindrada, la verdad es que estamos, por concepto, ante todo un acierto. Por tamaño, se puede equiparar a una Yamaha X-MAX. De hecho, está basada en un modelo que en España se comercializa bajo varios nombres y tanto en formato eléctrico como de gasolina. La versión más popular es la que distribuye la valenciana Wottan: la Wottan Storm.
La variante eléctrica del modelo es la que sirve de base a la e-ADV y se comercializa como NEM T10, Taro 10, JCadi Alex o Ebroh Strada. Todas las versiones se fabrican en China, aunque no todas proceden del mismo fabricante (las licencias de uso del producto en China lo permiten). Uno de los que produce el modelo, por ejemplo, es Wuxi Stanford Electric Vehicle. Este es, además de su precio, el principal factor que frena su despunte comercial, ya que no se trata de un modelo exclusivo de una marca. Es de esperar, de hecho, que llegue más adelante bajo varias enseñas más.
Técnicamente, la e-ADV hace uso de un motor central de 6 kW de potencia nominal, aunque rinde 11 kW de potencia máxima, lo que se traduce a 15 CV. El motor se alimenta de una batería que no es extraíble, aunque, por esto mismo, puede ofrecer una buena capacidad de carga bajo su asiento, al contrario de lo que sucede con muchas otras motos eléctricas.
Son 5,18 kWh de capacidad (72 V y 72 Ah) los que anuncia. Las celdas que componen el módulo tienen la química LFP, que es el tipo de batería que mayor vida útil tiene en la actualidad.
Con una carga completa, según indican los diferentes distribuidores del modelo en España, puede llegar a ofrecer hasta 160 kilómetros de autonomía. La realidad, basados en nuestra experiencia con motos eléctricas, la potencia, batería peso y características del modelo, es que la autonomía en uso diario oscilará entre los 100 y 120 km si no se afrontan demasiadas vías rápidas.
Por otro lado, su velocidad máxima es de 110 km/h, una cifra que permitirá a la e-ADV afrontar vías rápidas de manera solvente, aunque, como se ha indicado, es algo que sacrificará gran parte de su autonomía útil.
