Ferrari ha presentado el plan estratégico que seguirá la compañía desde 2022 a 2026, y con ello ha dejado varios hechos reseñables que supondrán un punto y aparte en la historia del fabricante italiano. Entre otros aspectos, Ferrari ha confirmado que para 2025 ya habrá un coche eléctrico en su gama, y que no tienen intención ninguna de trabajar con conducción autónoma.
La firma de Maranello ha aprovechado el Capital Markets Day que celebra de manera anual para hacer hincapié en que la actividad de la compañía de los próximos años tendrá a los empleados, la electrificación y la neutralidad de carbono para 2030 como ejes principales de su actividad.
Con esta fecha como primer gran objetivo en cuanto a electrificación, son varios los pasos que gradualmente ha de ir ejecutando Ferrari antes de para 2030 lograr que el 80 % de sus ventas se correspondan con modelos híbridos y eléctricos, lo que indica, a su vez, que el 20 % de los coches vendidos seguirá sin contar con ningún tipo de asistencia eléctrica para finales de esta década.
El hito más cercano se producirá en 2025, cuando Ferrari ya contará con un coche eléctrico en su gama. Un modelo que para final del ejercicio deberá haber representado el 5 % de las ventas totales de la marca, mientras esperan que los híbridos acaparen el 55 % de las entregas totales de la compañía para 2026.
Además de sobre el coche completamente eléctrico, esta responsabilidad recaerá sobre modelos como el Ferrari SF90 o el 296 GTB, que ya son híbridos enchufables, así como también sobre el SUV o crossover que Ferrari presentará próximamente, el Ferrari Purosangue, un modelo que contará por un lado con un V12 y por otro con una opción híbrida enchufable.
Antes de 2025 la marca habrá completado la construcción de un E-Building dentro de su fábrica en Maranello, que es la que se encargará de producir las partes esenciales de los coches eléctricos de la compañía. Aquí se producirá desde el motor eléctrico hasta la propia batería (aunque no dejan claro si será sólo el ensamblaje o también sus celdas), así como también albergará la línea de producción de los modelos. Aún con ello, Ferrari no quiere dejar de lado su faceta más tradicional, ya que ha comunicado que este edificio también contará con su propio taller de pintura.
Por otro lado, si Ferrari tiene la intención de estar produciendo ya en serie su primer coche eléctrico para 2025, este debería haber sido presentado mucho antes. La firma italiana acostumbra a revelar los modelos entre un año y un año y medio antes de que su producción dé comienzo, por lo que en algún punto de 2023 su diseño debería ver la luz.
Sobre este modelo se ha pronunciado Benedetto Vigna, actual CEO de Ferrari, en gran medida el responsable del cambio de rumbo que ha sufrido la marca en estos últimos compases. "El primer Ferrari completamente eléctrico será un Ferrari de verdad", comentó durante el día de ayer.
La marca también ha comunicado que estamos a muy poco tiempo de conocer el "reemplazo" del Ferrari LaFerrari, que fue el primer híbrido que la compañía fabricó, el que marcó el camino a seguir por el resto de modelos de esta condición.